El debate republicano, primer paso para elegir a quien irá a la competencia por la presidencia de los Estados Unidos en las elecciones primarias, estuvo cargado de un sinnúmero de emociones y tensiones para los 8 candidatos que llegaron con sus propuestas, y para los miles de ciudadanos estadounidenses que estuvieron pendientes de lo que ocurriría en la conversación.
Horas antes del debate, un hecho le puso picante a esta jornada política: la ausencia del expresidente Donald Trump, quien es el más firme candidato en disputarle la silla en la Casa Blanca al actual presidente, Joe Biden, y que horas antes anunció que no asistiría a debatir.
El desaire de Trump arrebató la oportunidad a sus rivales, muy rezagados en las encuestas, de enfrentar en vivo al expresidente durante dos horas en esta cita que tuvo lugar en la ciudad de Milwaukee, en el estado de Wisconsin. En su lugar, Trump concedió una entrevista pregrabada a Tucker Carlson, ex presentador estrella de Fox News, que se publicó en la web minutos antes del debate, como informó AFP.
En el debate, el expresidente fue nombrado repetidamente en la discusión entre el resto de candidatos, con varias preguntas de los presentadores y moderadores de Fox News sobre sus múltiples procesos con la justicia. Al preguntarles a los candidatos quiénes apoyarían a Trump si resultara nominado por el partido y declarado culpable de los casos penales, todos levantaron la mano excepto el gobernador de Arkansas, Asa Hutchinson, y el exgobernador de Nueva Jersey, Chris Christie.
“Este es el límite. Alguien tiene que dejar de normalizar esta conducta”, dijo Christie. “Creas o no que los cargos penales son correctos o incorrectos, la conducta está por debajo del cargo de presidente de Estados Unidos”.
Tras esta intervención, Christie fue abucheado, y también Hutchinson, quien añadió: “Obviamente, no voy a apoyar a alguien que ha sido condenado por un delito grave”.
Sin más ni más, el único argumento que dio Trump por su ausencia es que no asistiría a debatir con personas a quien superaba en las encuestas por un 50% o más.
Ante la justicia
Donald Trump, expresidente y candidato más firme para disputarle la presidencia a Joe Biden, deberá acudir a la justicia luego de que la fiscal de Georgia, Fani Williams, lo inculpara por presuntamente alterar el resultado de las elecciones de 2020 en Georgia, lo que le representa su quinta imputación en este 2023.
El día del imputación, Williams dio hasta el 25 de agosto para que Trump se presentara a la justicia y agregó que “la acusación formal alega que, en lugar de acatar el proceso legal de Georgia para impugnaciones electorales, los acusados se involucraron en una empresa de crimen organizado para anular el resultado de la elección presidencial de Georgia”.
Por esto, Trump acudirá en el transcurso de este jueves a la justicia con un plan b: pagar la fianza de US$2.000 que le permitiría continuar con su carrera a la Casa Blanca sin que de por medio estén los juicios en su contra.
Trump, de 77 años, y 18 coacusados más, se enfrentan a cargos de crimen organizado y conspiración. Tienen plazo hasta el mediodía (16H00 GMT) del viernes para entregarse a las autoridades de Georgia.
Horas antes, el exalcalde de Nueva York, Rudy Giulianix, quedó en libertad bajo fianza de 150.000 dólares después de que se entregara a las autoridades de Georgia, las mismas que le acusan de haber ayudado a Donald Trump a intentar alterar el resultado de las elecciones de 2020 en este estado del sur de Estados Unidos.
Giuliani, de 79 años, quien fue abogado personal de Donald Trump mientras fue presidente, fue fichado en la cárcel del condado de Fulton, en Atlanta, según los registros penitenciarios.
Hoy el mundo espera la foto de la reseña del expresidente Trump, déjandolo como el expresidente más imputado en la historia de los Estados Unidos.