Ser tan pequeños, pero ser muchos y con la capacidad de satisfacer las necesidades básicas creando tecnologías como la máquina de vapor, el motor de combustible y los fertilizantes para la agricultura, perturbó la estabilidad de la Tierra. Johan Rockström, director del Centro de Resiliencia de Estocolmo, en Suecia, afirmó en el video publicado por el Foro Económico Mundial en 2017 que “ya se tiene una abrumadora cantidad de evidencia científica que deja ver que en solo cinco décadas, la humanidad pasó de ser un mundo pequeño en un planeta grande, donde se podía permitir un crecimiento económico poco sostenible, a ser un mundo grande en un planeta pequeño que llegó a su punto de saturación y tocando el techo de la capacidad biofísica del planeta”.
Las dos primeras décadas de este siglo han registrado los años más cálidos de la historia y el periodo entre 2015 y 2018 va punteando entre los primeros puestos. Los humanos dependen de esos 11 kilómetros de grosor de atmósfera para sobrevivir en la Tierra. Ya pasaron 50 años de un incremento exponencial negativo, el reto actual es transformar la economía hacía un viaje a la sostenibilidad.
Diez pruebas de que la humanidad tiene responsabilidad en la crisis ambiental que se vive actualmente y 10 datos sobre cómo también se ha despertado una consciencia y hay una intención de cambiar las cosas.
Usted también, desde su diario vivir, puede ayudar. Santiago Arango Aramburo, investigador en cambio climático, ingeniero civil de la Universidad Nacional de Colombia y posdoctorado en la Universidad de Lugano (Suiza), asegura que esos pequeños pasos son un gran aporte en este momento: use el servicio de transporte público, ahorre energía, trate de consumir menos carnes –sobre todo la de vaca–, reduzca el consumo de agua e infórmese sobre cómo vivir con menos recursos.