-
La comunidad del barrio Nueva Jerusalén en Bello, Antioquia, se encuentra consternada por la situación que atraviesa la Iglesia María Reina de los Corazones, la cual sufrió graves daños en su estructura debido a las fuertes lluvias y vientos asociados a la llegada del invierno. Foto: Esneyder Gutiérrez -
El párroco Gonzalo Tabares Wiles ha estado trabajando con la comunidad para reparar el templo. Sin embargo, los fondos recolectados hasta ahora no son suficientes para cubrir los costos necesarios para restaurar el techo del mismo. Foto: Esneyder Gutiérrez -
Las inclemencias del tiempo han afectado seriamente la estructura del templo, con el techo siendo la parte más perjudicada. Sin una cubierta adecuada, el interior de la iglesia está expuesto a las condiciones climáticas adversas, aumentando el riesgo de más daños. Foto: Esneyder Gutiérrez -
La reparación del techo y otros daños estructurales requieren de una inversión significativa que la comunidad local no puede asumir por completo. Se hace un llamado urgente a la solidaridad de la comunidad más amplia y a posibles donantes externos. Foto: Esneyder Gutiérrez -
Para prevenir daños mayores, los santos, cristos y demás mobiliario de la parroquia han sido distribuidos y resguardados en algunas viviendas del sector. Esta medida es temporal y busca preservar estos bienes mientras se realizan las reparaciones. Foto: Esneyder Gutiérrez -
La Iglesia María Reina de los Corazones no solo es un lugar de culto, sino también un centro de encuentro y apoyo comunitario. Su restauración es crucial para devolver a los feligreses un espacio seguro y adecuado para sus actividades religiosas y sociales. Foto: Esneyder Gutiérrez -
La situación que enfrenta la Iglesia María Reina de los Corazones es un desafío significativo para la comunidad del barrio Nueva Jerusalén en Bello. Con el liderazgo del párroco Gonzalo Tabares Wiles y la solidaridad de todos, es posible superar esta adversidad. Foto: Esneyder Gutiérrez
Bello, techo de iglesia colapso por invierno y fuertes vientos
El templo María Reina de los Corazones, ubicada en el barrio Nueva Jerusalén, sufrió daños en su estructura debido a la llegada de la temporada de invernal