La apuesta para aumentar la cobertura del servicio de gas natural en Colombia es alta o por lo menos así lo planteó ayer el presidente Juan Manuel Santos, en la instalación del congreso número 18 de la Asociación Colombiana de Gas Natural (Naturgás), en el hotel Intercontinental, de Medellín.
El mandatario destacó que en los últimos cuatro años casi dos millones de hogares adicionales se conectaron al servicio de gas natural por redes, “lo cual corresponde a más de 2,5 veces la meta que se había planteado el actual Gobierno”, pero no satisfecho con eso Santos fijó la meta, para el año 2018, en un millón de viviendas más con suministro de este combustible.
En esas condiciones el plan del presidente es que las instalaciones residenciales de gas natural pasen de 7,6 millones a 8,6 millones. “¿Eso qué significa? ¿En qué se traduce? Mayor calidad de vida para las familias, que hoy pueden preparar sus alimentos con una energía segura y barata. Significa ahorrar tiempo y dinero, cuidar el bolsillo”.
Pero, ¿qué inversiones requiere llevarle el gas a ese millón de viviendas? y, ¿qué tan factible es lograr la meta fijada por Santos?
El primero en responder es Antonio Celia Martínez, presidente del Consejo Directivo de Naturgás y de Promigás, quien estima que el monto de inversión sería de unos 400 millones de dólares (alrededor de un billón de pesos).
El empresario señaló que anualmente se están conectados a este servicio unos 400 mil hogares. “No es una tarea fácil porque hay zonas a las que difícilmente llegaremos, pero es una meta ambiciosa”.
En 2014 el sector llevó el suministro del energético a 450 mil viviendas y para cumplir la meta de un millón de residencias más de aquí al 2018, Celia sugirió implementar un plan de gasoductos regionales.
“Para impulsar esos gasoductos sería necesario un acuerdo entre la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg) y las compañías. Esa fue una estrategia que en el pasado nos dio buenos resultados y habría que replantearla ahora”, puntualizó.
A su turno el presidente de Naturgás, Eduardo Pizano, también considera que es viable alcanzar la meta propuesta por la presidencia. “Es difícil, pero habrá un crecimiento vegetativo que corresponde a todas las viviendas que se construyan en el país, pero paralelamente vamos a tener que llegar a unos rincones muy apartados del país y ese ejercicio es duro y muy costoso”.
Sobre el costo de llevarles gas natural a ese millón de nuevos suscritores, el dirigente estima que se necesitarían recursos por dos billones de pesos, a razón de dos millones de pesos por conexión.