El costo final de los domicilios en Colombia estaría aumentando por cuenta de los cobros asociados a las plataformas de repartos, o al menos así lo están percibiendo los usuarios.
EL COLOMBIANO realizó un sondeo para consultar si, efectivamente, los clientes consideran que las plataformas han aumentado los cargos por las entregas. En este ejercicio participaron 447 personas y el 95,3% afirmó que sí sentía el incremento.
“Sobre todo Rappi: se volvieron exagerados en los cobros. Fuera del costo del domicilio, cobran dizque tarifa por servicio. En ocasiones casi que esas tarifas igualan el valor del producto”, escribió al respecto Juan Castillo, quién respondió a la encuesta.
En esa misma línea, otro cibernáuta marcado como “Guerra”, replicó que “hay domicilios que cuestan mas que el mismo producto , he visto que algunos domicilios valen $12.000. ¿Será que lo traen en limusina?”.
Este diario se comunicó con las plataformas para transmitirles la inquietud que hoy día manifiestan los consumidores. Sin embargo, hasta el cierre de esta edición, solo iFood se pronunció. Arthur Freitas, su jefe de Producto, crecimiento y marca, anotó que “la aplicación siempre se ha caracterizado por su constante trabajo en pro de sus aliados, los domiciliarios y usuarios”.
“Por esta razón —añadió—los precios que se manejan en la plataforma son los mismos para todas las personas, desde cualquier lugar o dispositivo, no hay ningún mecanismo que genere que la plataforma discrimine por tipo de usuarios y le cobre más a unos que a otros”.
Freitas subrayó que “iFood tiene una política de transparencia con sus públicos objetivo para ofrecer una variada oferta gastronómica y con los mejores precios para todos”.
Sin embargo, no solo los consumidores han hecho referencia a los cobros transferidos por las aplicaciones. También desde el gremio de los restaurantes han reconocido que los márgenes de ganancia luego de entregar un platillo a través de plataformas, no son tan cuantiosos como suele pensar el comprador.
Habla un restaurantero
Federico Miranda es propietario de un restaurante y funge como presidente de la Junta Directiva del Tour Gastronómico de Medellín. En diálogo con este diario, relató que en el gremio había desconocimiento entorno al funcionamiento de la logística domiciliaria.
De ahí que con la llegada de las plataformas, los restauranteros pensaron que podrían tener una solución para llevar sus preparaciones hasta la puerta de los clientes y delegar la responsabildad de la entrega en esas aplicaciones.
“Los restaurantes entendían que era muy complejo manejar los domicilios, manejar los pedidos por teléfono, los empaques y las zonas para los domiciliarios. Entonces, al principio, se firmaron contratos con comisiones casi que del 20% o el 25%. Eso era casi la utilidad total de la entrega”, detalló Miranda.
“Eso fue cambiando poco a poco, ahora las comisiones están entre un 15% y un 20%, son muy pocos los restaurantes o las cadenas que tienen negociaciones por debajo de ese tope. Pero con todo y que ha bajado casi 10 puntos porcentuales, de todos modos es muy significativo dentro de las estructura de resultados de los restaurantes”, agregó.
En medio de la creciente demanda por comidas a domicilio, anotó que la llegada de nuevas plataformas al mercado ha contribuido a mejorar el valor de las comisiones que se le cobran a los establecimientos gastronómicos.
Rodrigo Segal, CEO y fundador de Justo, plataforma chilena con operación en Colombia y otros cinco países, explicó que el margen de ganancia en cada restaurante depende de la estrategia particular a la hora de transmitir los precios al consumidor final.
“Hay unos que suben todo el precio con la comisión de las aplicaciones y hay otros que mantienen los precios de la carta y absorben el costo de la comisión”, adhirió.
En el contexto actual del mercado, explicó que la propuesta debe orientarse a la provisión de una página propia para los establecimientos, de manera que los comensales hagan directamente los pedidos al restaurante. Esto teniendo en cuenta que, ante los incumplimientos del domiciliario externo, el impacto negativo en la atención al cliente, es asumido por los restaurantes, no por las plataformas.
La alternativa
Federico Miranda indicó que “hay demasiadas quejas porque llegó mal el producto y lastimosamente, uno puede ver como manejan los repartidores de las plataformas en las calles. Y ni hablar de protocolos de bioseguridad, que no se están manejando con las aplicaciones”.
Con ello en mente, desde su óptica, los restaurantes deben empezar a incluir sus propios domiciliarios: “no es tan complicado, ellos tienen sus funciones específicas y, si uno hace bien la tarea, pueden ser una imagen externa positiva. Si somos capaces de abrir un restaurante, de tener servicio a la mesa y servicio de bar, somos capaces de tener domicilios. Es hacer el esfuerzo como empresarios de aprender”.