El Banco de Pagos Internacionales (BIS por sus siglas en Inglés), conocido como el coordinador de los grandes bancos centrales del mundo, pidió combatir el alto costo de vida que se vive en todo el mundo. Y para ello sugirió que las tasas de interés deberían subir “rápida y decididamente” antes de que la inflación se convierta en un problema de mayores proporciones.
“La clave para los bancos centrales es actuar con rapidez y decisión antes de que la inflación se arraigue”, comentó Agustín Carstens, gerente general del BIS, en un apartado del reporte anual del organismo publicado ayer.
Vale recordar que la reunión anual del llamado “banco de los bancos” tuvo lugar esta semana en Suiza, un encuentro en el que se abordó la preocupación por el elevado precio de bienes y servicios en el ámbito global.
En este sentido, Carstens indicó que actuar en los trimestres por venir será la clave para hacerle contrapeso a este desequilibrio que ya contagió de pesimismo a los mercados bursátiles; en los que las acciones globales, de acuerdo con agencias especializadas, han caído un 20% en lo corrido de este año.
En Estados Unidos, por ejemplo, el fantasma de la recesión económica ya ronda entre las perspectivas de los especialistas, producto de una inflación que no se veía desde hace 40 años y que obligó a subir las tasas de interés de una manera agresiva para tratar de enfriar los precios.
En línea con ello, el pasado viernes, Kristalina Georgieva, jefa del Fondo Monetario Internacional (FMI), había señalado que sí es posible combatir la carestía generalizada pero advirtió que hacerlo puede causar “algo de dolor” a los consumidores, precisamente porque el aumento en los tipos de interés desincentivan las compras.