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Después de casi cinco meses de haber cesado las operaciones aéreas (a excepción de las humanitarias y carga) se dio vía libre para las primeras rutas que retoman la operación comercial desde Rionegro, a través de un piloto que conecta esta terminal con Bucaramanga y Pereira, gracias a EasyFly.
La operación inicia diariamente con la llegada de un vuelo desde la capital de Santander a las 9:40 a.m., con el regreso hacia el mismo destino a la 1:00 p.m.; mientras la salida a Pereira, desde Rionegro, se prevé a las 10:20 a.m. con regreso a las 11:40 a.m.
El valor por trayecto empieza desde los 155.000 pesos para Bucaramanga y 135.000 para Pereira y las rutas serán cubiertas por ATR42, aeronaves que tienen una capacidad para 46 pasajeros.
“Son de última generación y cuentan con modernos sistemas que garantizan la renovación del aire durante el vuelo, lo que permite fortalecer aún más los estrictos protocolos de bioseguridad de la aerolínea”, afirmó EasyFly a través de una comunicación.
El inicio llega con otro anuncio del presidente Iván Duque la apertura de seis rutas más con una muy próxima: Cúcuta, el 21 de agosto, también liderada por EasyFly, según le confirmó a EL COLOMBIANO, el gerente del Aeropuerto, Freddy Jaramillo, quien aseguró, además que al menos 35 vuelos humanitarios han llegado por esta terminal en el periodo covid, operando sin contratiempos.
“Estamos anunciando que desde este aeropuerto se van a habilitar seis rutas aéreas, con todos los protocolos de seguridad, de cuidado, de desinfección, en vuelo de la tripulación, para proteger al pasajero y lo hacemos con un sentido de responsabilidad compartida, dijo Duque al visitar ayer el aeropuerto José María Córdova para recibir este primer vuelo piloto procedente de Bucaramanga.
La Aeronáutica Civil confirmó la conexión con otros destinos como San Andrés, Armenia y Manizales, que están a la espera que se concreten las operaciones con la confirmación de alguna aerolínea que quiera asumir los trayectos, así como los avales de los mandatarios locales para completar los seis destinos aprobados y en operación.
La decisión se toma en un contexto en el que, según el presidente Duque, se “ha enfrentado una pandemia con un concepto claro, la protección de la vida y del sistema de salud, pero también la protección del desarrollo económico y social para ir recuperando vida productiva”.
Con esta decisión se avanza en el 10 % restante que falta por reactivar de la economía, si se tiene en cuenta que Duque reconoció que ya el 90 % de las actividades están funcionando.
¿Qué significa?
El gobernador (e) de Antioquia Luis Fernando Suárez, sostuvo que: “Estamos muy satisfechos, siempre la ruta es trabajar con los alcaldes, de encontrar propósitos comunes y de trabajar intensamente por ellos, de ahí la satisfacción que tenemos de este paso y sin duda hay un mensaje importante que da el Presidente de la República viniendo a Antioquia a acompañar la apertura”.
En la mira se está trabajando con el Olaya Herrera en Medellín, así como Carepa y El Bagre para avanzar en protocolos y habilitar el transporte aéreo en estas terminales.
Por su parte, el alcalde de Rionegro, Rodrigo Hernández, reconoció la importancia del anuncio por el empleo y el ingreso de quienes viven de este sector (estimado en 7.500 familias de taxistas, comerciantes, conductores de buses, personal de servicios generales, entre otros): “Esta operación aérea devuelve la esperanza a las familias que dependen económicamente de este terminal”.
Por su parte, Germán Urrea, director de la Facultad de Ingeniería Aeronáutica de la Universidad Pontificia Bolivariana aseguró que “el piloto es importante para la reactivación, aunque hace falta mucho (...) se deben tomar decisiones de carácter nacional, no por cada uno de los alcaldes”, aunque también sostuvo que “esto ayuda a demostrar que las condiciones de bioseguridad que están en la resolución 1054 van a ser muy eficientes y efectivas en aras de controlar y mitigar la propagación de la covid”.
En su exposición, cuestionó cómo en las rutas mencionadas durante el piloto no está la conexión con Bogotá, que sin duda es la más relevante para la operación con el José María Córdova, en Rionegro.
En el mismo sentido la abogada experta en el sector aéreo, Claudia Velásquez, argumentó que “la operación punto a punto es sumamente difícil porque las aerolíneas operan a través de rutas para que sea rentable. En este momento, no se ve como una decisión que llegue a impulsar la difícil situación que están teniendo las aerolíneas y las empresas del sector”.
Los pilotos, sugiere, debieron haber sido de 10 días y una vez superada la prueba avanzar de manera más completa. Antes de esta apertura, solo se había realizado el piloto aéreo activado entre Bucaramanga y Cúcuta, el pasado 21 de julio, que ha permitido la movilización de al menos 1.000 pasajeros, en cerca de 60 vuelos hasta este fin de semana que pasó, informó la Aerocivil.
Además, de acuerdo con Velásquez en este punto hay una importante intervención sobre “cómo las aerolíneas deben atender su negocio”; contrario a lo que debería suceder, pues ellas son las que conocen cómo se debe organizar el plan de vuelo, en función de la demanda de pasajeros.
“Eso hace el negocio inviable, porque a la fuerza están haciendo que las aerolíneas operen (...) Aquí debe haber un principio de responsabilidad y respeto en la autonomía frente al intervencionismo de las empresas; si bien es cierto que hay que cuidar la vida y las personas esta no es la forma”.
15 aperturas, en la mira
En medio de la inauguración del vuelo piloto en Rionegro, el presidente Iván Duque reafirmó el compromiso de habilitar la operación de 15 rutas desde la capital en el país (ver Lista).
Anuncio que generó optimismo en Andrés Uribe, presidente de la International Air Transport Association (Iata) para Colombia, porque al tener la firme intención de hacerlo con ciudades principales se evidencia un paso importante en la apertura de operación doméstica para después abrirle camino a los vuelos internacionales.
De hecho, la Iata estima que el golpe al P&G de las compañías aéreas por cuenta de la parálisis ocasionada por la covid-19 será de 4.000 millones de dólares en América Latina, y en el mundo la cifra alcanzará los 84.000 millones, al cierre de 2020.
Y en el mismo sentido la disminución de los ingresos “estimada en casi 50 %”, le costará a la industria globalmente 519.000 millones de dólares frente al año pasado, mientras en la región la reducción está avaluada en 18.000 millones de pesos, confirmó Uribe.
Este proceso, que ha sido intenso desde el sector turístico privado, por la autorización individual de mandatarios locales en la puesta en marcha, empieza a ver sus frutos, aseguró Paula Cortés, presidente de la Asociación Colombiana de Agencias de Viajes y Turismo (Anato). No obstante, “necesitamos saber la disposición de las aerolíneas a arrancar. Ha sido un trabajo muy duro por hacer uno a uno (...) Está bien que los mandatarios locales tienen, dependiendo del nivel de contagio la decisión, pero ha sido traumático”, dijo.
Por ejemplo con 14 rutas aprobadas, se reactivará entre el 15 % y 20 % de la actividad aérea, dijo Cortés, “que es nada, pero mucho para lo que llevamos en estos cinco meses”.
Para Francisco Lalinde, vicepresidente de Operaciones y personas de Viva Air, hay expectativa frente al reinicio de operaciones, por ahora programado para el primero de septiembre, y cubre el 12 % de sus actividad precovid, con 108 vuelos programados.
“Esta primera etapa de operación iniciará conectando las ciudades de Medellín y Bogotá entre sí y desde aquellas, Pereira, Montería, Cartagena, San Andrés, Santa Marta, Barranquilla y Cali como fue definido por la Aeronáutica Civil en la fase uno de restablecimiento de operaciones de aerolíneas”, agregó Lalinde.
Desde el punto de vista internacional el plan está alineado con las ruta a Lima desde Bogotá y Rionegro y Miami desde Rionegro, aunque todavía están pendientes de definición por el Gobierno Nacional.
La confianza será clave en el éxito de la apertura plena de cielos, por eso no solo los aeropuertos, las aerolíneas y los hoteles han implementado sus protocolos sino están anunciando la certificación con Sellos como el Check-in Certificado y el de “operaciones seguras”.
Es el caso de Avianca que anunció, a través de un comunicado de prensa, que está “lista para volar de nuevo en Colombia y los demás mercados donde opera y espera que, con el trabajo conjunto que se viene adelantando entre los gobiernos, autoridades, gremios y aerolíneas muy pronto se reactiven las operaciones aéreas en la región”.
El sello Check in Certificado ya lo había anunciado también en sus procesos Viva Air desde el 16 de julio.
Sea como fuere Cortés aseguró que gran parte de la generación de confianza dependerá “de que se comuniquen bien los protocolos, aunque es imposible generar una tranquilidad al 100 %”. En este sentido resulta primordial que se hagan campañas de promoción invitando al colombiano, por ejemplo a apoyar al sector, agregó.
“Lo que no nos puede pasar es que a pesar del trabajo en la consecución de la conectividad aérea, etc., no haya demanda y eso nos limite a tener un crecimiento lo más rápido posible” en este escenario, concluyó Cortés
Editora de Economía de El Colombiano. Amante de las buenas y nutridas conversaciones, la música y los viajes.