Desde la familia pobre, de la ciudad o el campo, que cocina con gas de pipeta, pasando por el puesto de comidas callejeras, el restaurante de corrientazos, la buñuelería, el negocio de empanadas, el asadero de pollos, el taller de soldadura y hasta las industrias que empleen hornos se verán afectados por el incremento que desde hoy tendrá el gas propano en cilindro (GLP).
Luego de consultar a varios distribuidores de este tipo de combustible en el Valle de Aburrá, el incremento promedia el 12,4 por ciento para el usuario final: el cilindro de 40 libras subirá unos 6.000 pesos (14,28 por ciento), hasta los 48.000; el de 20 libras sube en 3.000 pesos (10,74 por ciento), para quedar en 30.000; y el cilindro de 100 libras que se comercializaba a 115.000 pesos ahora se trepa a los 129.000 (12,17 por ciento más).
Gasnova, gremio de los distribuidores de gas propano, considera que el incremento para el usuario en el ámbito nacional será de 15 por ciento, pero a los compradores del energético el aumento del precio será de 94 por ciento, lo que se va para Ecopetrol.
“El margen de intermediación del gas propano se queda en costos de transporte, distribución y comercialización, por eso es muy difícil que las 590 empresas distribuidoras que hay en el país ajusten sus márgenes para que los usuarios no sientan el impacto negativo del aumento en el valor del servicio”, afirmó Evamaría Uribe Tobón, presidenta de Gasnova.
En esas condiciones, la dirigente señala que 12 millones de colombianos de estratos 1, 2 y 3, que consumen gas en cilindros, tendrán que sacar hasta 12.000 pesos adicionales para obtener, en muchos casos, la única opción de energía, especialmente en zonas apartadas.
¿Por qué el alza?
El incremento, que está por verse en cuánto impactará la canasta básica familiar, obedece al cambio en la fórmula tarifaria que aplicó la Comisión de Regulación en Energía y Gas (Creg), mediante la Resolución 079 de 2015.
Según la entidad, la medida se justifica en que el costo de oportunidad del GLP cambió para Ecopetrol como principal productor, ante precios externos del propano y del butano y la posibilidad de sustituir el gas natural por el GLP en sus procesos de refinación.
“El objetivo de esta resolución es enviar una señal de precio para que el GLP que Ecopetrol tenía destinado para uso propio, sea puesto a disposición de los usuarios nacionales del servicio público domiciliario de GLP, siendo estos últimos los verdaderos beneficiados”, respondió por escrito la Creg a este diario.
Pero Gasnova considera que el cambio introducido va en detrimento de los usuarios y a favor de Ecopetrol: “esta decisión llevará a un aumento permanente en los precios del gas propano, pues su valor dependerá de un producto que es mucho más costoso y tiene problemas en su oferta, como es el caso del gas natural”, afirma su presidenta.
Entre tanto, la Creg anunció que ya se trabaja en la definición de un nuevo marco regulatorio para la comercialización mayorista de gas en cilindro (GLP) y nuevos esquemas para su distribución y compra venta al por menor.