El aislamiento preventivo producto de la emergencia y las demás medidas que se han adaptado por esta época para priorizar el distanciamiento, han hecho que surjan dudas sobre procesos en materia de vivienda como entrega del inmueble, pagos de arrendamiento o trasteos.
Pero también hay preguntas sobre cómo escriturar viviendas en tiempos de covid; ¿se están demorando los procesos más de lo debido?; ¿cambiaron las reglas para poder hacerlo?; ¿cómo están funcionando las notarías en este momento?; ¿habrá algún cambio en el modelo de las escrituras con esta emergencia?
Pues bien, EL COLOMBIANO indagó con fuentes oficiales sobre qué está pasando con este tema para despejar dudas y esto respondieron...
Francisco Ochoa, avaluador y expresidente de La Lonja, comentó que los avalúos, que se requieren fundamentalmente cuando hay crédito hipotecario de por medio, están realizándose con normalidad y bajo medidas de bioseguridad.
Y aclaró que los que no tienen fines hipotecarios se están haciendo de forma virtual por plataformas como Zoom o Facetime, o simplemente guiándose por fotos, escrituras o avalúos anteriores, aunque si esto no da la suficiente tranquilidad, el especialista no emitirá un concepto.
Por su parte, fuentes de entidades públicas apuntaron que es cierto que estos trámites podrían tomar más tiempo de lo habitual, incluso hasta mes o mes y medio, porque luego de la declaratoria de emergencia las notarías debieron cerrar por 15 días.
No obstante, precisaron que desde hace dos semanas algunos de estos establecimientos operan con ‘normalidad’ de ocho de la mañana a una de la tarde y que por ahora reciben los documentos para escriturar de forma virtual, tras lo cual pasan a un protocolista que estructura las negociaciones y finalmente se cuadra una fecha para hacer la firma del documento final.
Esto, en aras de que el interesado haga solo un desplazamiento. En caso de que esta diligencia coincida con un día en que el firmante no esté en pico y cédula, la notaria le otorgará un permiso especial para que pueda hacerlo, entendiendo que esto es un “servicio público esencial” según el Gobierno Nacional.
Tenga en cuenta que este trámite acarrea varios costos, como explica la Notaría 19 de Bogotá, que pone un ejemplo con un inmueble que se vende por 100 millones de pesos.
En este, tanto vendedor como comprador deben correr con los gastos de escrituración correspondientes al 0,54 % sobre el valor de la venta, que en el citado ejemplo equivaldrían a 270.000 pesos de parte y parte, para un total de 540.000.
Otros impuestos son la Retefuente, equivalente al 1 % sobre el valor de la venta, y que paga el vendedor solo si es persona natural; y los aportes a la Oficina de Instrumentos Públicos por el registro de la escritura, que son el 1,67 % del valor.