El grupo de investigación y análisis económico Bbva Research entregó una actualización de sus perspectivas a nivel macro para Colombia. Allí reflejó que espera que el Producto Interno Bruto (PIB) se expanda 5,5 % este año, lo que significa una mejora respecto al 4,8 % que vaticinaba anteriormente.
“Un año después del inicio de la pandemia podemos decir que tenemos relativamente buenas noticias. A pesar de que los contagios siguen siendo muy elevados en Europa y en Estados Unidos, las medidas de apoyo han permitido que este último se convierta en un motor de crecimiento junto con China; eso le va a dar una ola positiva a toda América Latina y en particular a Colombia”, explicó Juana Téllez, economista jefe de Bbva Research para el territorio nacional.
Según ella, aunque en el año en curso la actividad productiva empezó con un nivel de debilidad más grande de lo que se esperaba por el repunte de contagios, ya que en diciembre y enero disminuyó el ritmo de la recuperación, en febrero y en marzo se vieron mejoras, y para abril nuevamente las medidas restrictivas de ciudades como Medellín y Bogotá podrían tener “efectos importantes” sobre la reactivación.
Sobre la coyuntura que afronta el país, además, un apunte importante del grupo es que “la vacunación se adelanta a un menor ritmo del esperado por dificultades logísticas y disponibilidad de material”.
No obstante, por ahora no se observa que ello impida el crecimiento pronosticado y, en cambio, Bbva Research exalta que habrá un nivel importante de consumo de bienes. Esta actividad, justamente, sería la jalonadora de la economía en 2021, en buena medida por la demanda del sector privado de artículos semidurables, que crecería 24 %, así como la inversión en vivienda que escalaría 9,6 %.
Esa recuperación gradual del consumo, a la que se le suma la reforma fiscal que planea el Gobierno, llevaría a que la inflación cierre 2021 en 2,9 % y luego salte hasta 3,4 % en 2022, con algunos riesgos en el panorama como el aumento de impuestos indirectos (IVA) que traería la tributaria, la “alta devaluación” del peso y los cuellos de botella por restricciones de oferta, entre otros, indica el análisis.
“En ese escenario el Banco de la República mantendrá sus tasas de interés quietas, por lo menos hasta el segundo trimestre del año entrante”, complementó Téllez. Para 2022, hay que agregar, el grupo prevé que el PIB nacional cerrará en 4,8 %.