Por Benjamin Gladstoneredaccion@elcolombiano.com.co
El semestre pasado, un grupo vino a Providence a hablar en contra de admitir refugiados sirios en este país. Como presidente de la Coalición Brown para Siria, entré en acción con mis colegas para montar una contra-demostración. Pero rápidamente me ví eliminado de la planeación de este evento: otras organizaciones estudiantiles no estaban dispuestas a trabajar conmigo por mis roles de liderazgo con organizaciones judías en el campus.
Esta no fue ni la primera ni la última vez que yo sería excluido en esta forma. También el semestre pasado, anti-sionistas en Brown hicieron circular una petición contra una charla por parte de la defensora de derechos de los transgéneros, Janet Mock, porque uno de...