Corría el año de 1629 cuando sobre lo que hoy es la Ciudad de México cayó una lluvia de 40 horas, conocida como “El Diluvio de San Mateo”, que obligó a evacuar a muchas familias españolas de la época. Los nativos Aztecas llevaban años lidiando con las inclemencias de la naturaleza y habían construido un sistema de acueductos y desagüe, que les permitió sobrellevar las inundaciones frecuentes en Tenochtitlán.
Los colonos de la madre patria que residían en México echaron por tierra el sistema construido por los indígenas hacia finales del siglo XV. Como la Historia es circular, algo parecido es lo que está pasando ahorita y motivó la marcha que convocó a 600 ciudades alrededor del mundo en el Día de la Tierra, bajo el lema que da el título a esta...