Si ha existido en Colombia una institución inútil a la hora de impartir justicia es la llamada “Comisión de Acusaciones”, pero que en la práctica ha sido una “Comisión de absoluciones”. Existe hace más de dos siglos, pero pocas veces ha cumplido su propósito: acusar ante el Senado a quienes tienen fuero especial como magistrados, fiscal general y al presidente, cuando haya causas para investigarlos penalmente.
Los resultados de esta Comisión son desalentadores. El último proceso que derivó en sanción provocó el retiro de la Corte Constitucional del magistrado Jorge Pretelt en 2015. Sin embargo, no hay antecedentes que muestren que esta corporación ha impartido justicia. Incluso en el tristemente célebre proceso 8000 la Comisión fue inoperante,...