Por Salomé Navia GonzálezUniversidad Pontificia BolivarianaFacultad de Com. Social, 1° semestresalome.navia@upb.edu.co
En Colombia amamos la pobreza, la enaltecemos, la honramos, le cantamos e incluso le hacemos telenovelas; porque nunca debe faltar la historia de la familia pobre y la familia rica, donde se le da el aspecto de villano a los adinerados. Es que los ricos son malos, malísimos... y todos los pobres son buenos. Ahí está la televisión para demostrarlo, el pobre siempre consigue lo que quiere, luego de luchar mucho contra el rico. Hemos creado el prejuicio de que si una persona tiene dinero es porque lo consiguió con actividades ilícitas y que todos son unos estirados engreídos, no nos detenemos a pensar en todo el esfuerzo que le...