Cuenta don Ricardo Olano en sus memorias que en 1873 Don Juan M. Fonnegra, jefe municipal, bautizó algunas calles de Medellín con nombres que aún conservan, Maracaibo, Caracas o Juanambú son, más que ciudades o enfrentamientos bélicos, reflejo del pensamiento del momento; en 1892 según el Acuerdo n.° 13, el Concejo nombró otras que aún se mantienen. Entre esas estaba Pascasio Uribe (1817 - 1889), en honor a ese rico industrial de la ciudad que donó las campanas de la iglesia de La Candelaria; negociante y pío, emprendimientos como la mina El Zancudo, La Ferrería Amagá y Locería de Caldas dan idea de su talante industrial.
La calle aún existe, tan olvidada como Don Pascasio y tan ausente como casi todo lo nuestro, ubicada justo al lado de esa...