Arder
Cada uno almacena en su cerebro la banda sonora de su vida. La música y las canciones describen el mundo, cuentan y cantan injusticias, enamoran, incitan o evocan; pero, más allá de la poesía, están el mercado y la industria, que rugen y a veces devoran. Si bien la música no cambia el mundo, sí hace de él un lugar más ameno.
Leía hace una semana que si una persona...