Por THOMAS NAKIOSredaccion@elcolombiano.com.co
En el transcurso de los últimos 20 años, mi esposa y yo hemos construido varios imperios de la moda, incluyendo a Lilla P y Leo & Sage, las cuales diseñamos y distribuimos. Tenemos empleadas a unas 30 personas directamente, y docenas más indirectamente para trabajos freelance y representantes de ventas. Emprendedores como nosotros deberíamos estar felices por la retórica proempresas que está saliendo de la Casa Blanca y el Congreso. Pero no lo estamos, porque están considerando cambios tributarios que, si se establecen, podrían hacerle daño a empresas como la nuestra, y a millones de consumidores americanos.
La propuesta en cuestión es el impuesto de ajuste fronterizo, el cual republicanos están...