Los personajes –o mejor, los antipersonajes– de este 2018 fueron sin duda la corrupción, el narcotráfico, y la incertidumbre con su hermano de sangre, el pesimismo.
En todas las variadas encuestas publicadas en el año, la corrupción ocupó el primer lugar como el principal problema del país. Los escándalos que conmovieron a la opinión pública fueron a montones. Y estos cerraron con broche de oro con el de Odebrecht, que salpicó a gobiernos de Latinoamérica. Sus tentáculos asfixiaron la ética y abrieron celdas para que las ocuparan no pocos servidores públicos de las repúblicas bananas.
Lo del narcotráfico es arrollador. El incremento de cultivos ha sido exponencial. Si en el año 2016 había 146 mil hectáreas sembradas, el año pasado llegaron a 171...