El escándalo de Odebrecht y ahora nuevamente con la alimentación escolar debería ser la tumba definitiva para la famosa frase: “Que roben pero que hagan” usada para justificar a los políticos corruptos que nos gobiernan. Porque Odebrecht y sus socios-políticos robaban pero hacían y ya vemos las consecuencias de este proceder: un país depredado a la más alta escala. El gobernador de Santander en respuesta a la captura de su secretaria de Educación por los sobrecostos en la alimentación escolar viene ahora a decir que a él le consta que los alimentos se entregaban a los niños. Definitivamente la frase de marras es una claudicación frente al pillo, una puerta abierta al asalto. Ahí está reflejado lo que pasa cuando una sociedad es permisiva frente...