La noticia pasó refundida entre las muchas que producimos: en el 2015 los narcocultivos en Colombia aumentaron un 42 % y llegaron a 159.000 hectáreas. La cifra supone que en apenas dos años se duplicaron (en el 2013 había 80.500 hectáreas) y que se ha dado un salto al pasado de más de quince: es el peor dato desde el 2001, cuando las mediciones mostraban 169 mil hectáreas. Es aun más complicado: la producción de cocaína creció un 68 %, el aumento más notable en todos los años de medición. El resultado final es que se perdió todo el esfuerzo hecho durante la administración Uribe y los primeros de Santos.
Las cifras estaban escondidas en una evaluación de la Oficina Nacional para el Control de las Drogas (ONDCP) de la Casa Blanca, que no solo no...