Pico y Placa Medellín
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Hablar de las autopistas 4G nos remonta al año 2008 cuando en su momento la Cámara de Comercio de Medellín para Antioquia, con Lina Vélez de Nicholls a la cabeza, lideró con un grupo de empresarios y otros gremios las llamadas Autopistas de la Montaña. En su momento, cuando se miraba el mapa de Antioquia y sus vías primarias, se observaba la desconexión frente al resto del país por medio de vías rápidas de altas especificaciones como las tenemos hoy parcialmente. Gracias al apoyo del ministro de Transporte para la época Andrés Uriel Gallego, el presidente Uribe, el Gobernador Aníbal Gaviria y posteriormente Luis Alfredo Ramos, logró avanzar en una primera propuesta de concesión que estructuró ISA.
Si bien hoy tenemos un gran avance y podemos viajar por varias de estas autopistas que nos han sacado del atraso histórico de infraestructura vial, vale la pena reflexionar sobre ciertos puntos. Somos el departamento de los túneles en Colombia gracias a las 4G que tienen 44 túneles construidos y en avance, sumado a los más de 300 puentes, lo que resalta la complejidad de la geografía de nuestro departamento. Aunque lo anterior evidencia la capacidad de ingeniería con la que cuenta el país, también preocupan los atrasos de 6 vías, muy avanzadas, pero que, por problemas puntuales, siguen sin ser entregadas o con grandes retrasos debidos a extorsión, robos y amenazas a los trabajadores específicamente en los tramos hacia Caucasia.
Uno de los inentendibles es la no apertura del túnel de Amagá en Pacífico 1 por una falla geotécnica que implica un túnel falso en Puerto Escondido. Para lo cual, temporalmente, la concesión diseñó un bypass de 300 metros para así poder dar apertura a la vía con una obra temporal. Sin embargo, no ha sido posible que la ANI reciba la obra temporal, con la cual se aliviaría el tiempo de viaje y las implicaciones en emisiones ambientales y costos de transporte que se generan por seguir usando la vía actual de la Huesera. Señores del gobierno nacional, la región clama por una solución práctica que permita abrir el túnel lo más pronto posible, al igual que la ampliación del peaje de Amagá que hoy genera un trancón de grandes dimensiones sobre todo durante los puentes festivos.
Por último, las obras para salir hacia el sur en Itagüí no dan espera, los semáforos instalados hacen que se pierda lo ganado en gran parte de la Autopista del Pacífico, lo mismo en Bello para salir a Vías del Nus, obras que son responsabilidad del Área Metropolitana del Valle de Aburrá en conjunto con los respectivos municipios.
Vamos para 20 años y la mayoría de las 4G sin terminar completamente. Es una invitación a la reflexión en qué estamos fallando.
