Pico y Placa Medellín
viernes
0 y 6
0 y 6
Uno de los proyectos de ley importantes que naufragó en la legislatura que recién termina fue la reforma del Instituto Colombiano de Crédito Educativo y Estudios Técnicos en el Exterior “Mariano Ospina Pérez” (Icetex). Este proyecto de ley era importante por el contenido y significado para la labor del Instituto en el contexto actual de la educación superior en el país, y además su texto era el resultado de un proceso de diálogo y concertación con diversos estamentos, para cumplir con uno de los puntos de los acuerdos por la educación superior pública del 2018.
El proyecto tenía por objeto proponer nuevas alternativas para aliviar las condiciones de los usuarios que presentan dificultades en el cumplimiento de las obligaciones contraídas con el Instituto; establecía algunas herramientas e incentivos para mejorar las condiciones y opciones para el acceso y permanencia en la educación superior, así como para las personas que hacen uso de sus servicios como entidad crediticia. Adicionalmente, promovía la excelencia, fortalecía el gobierno corporativo del Instituto y su articulación con diferentes actores del sistema educativo. En últimas, el proyecto esbozaba un modelo más especializado y mejor diseñado de sistema de crédito para la educación superior.
Algo importante del proyecto es que tenía los componentes que debía contener la reforma del Icetex provenientes del acuerdo de la mesa de diálogo para la construcción de acuerdos para la educación superior pública; es decir, incluía los temas de gobernanza y estructura del Instituto, portafolio de servicios y las fuentes de financiación, y además adicionó un capítulo crucial como el de los alivios en tasas de interés, condonación de capital y subsidios que para esta coyuntura y el mediano plazo es un tema crucial.
Destacable, especialmente, la configuración de todo un proceso amplio de diálogo y concertación, que duró cerca de dos años, no solo desde la mesa misma para los acuerdos para la educación superior pública, sino también a través de la constitución de la comisión de transformación del Icetex que resultó de la mencionada mesa y que incluyó tanto a las organizaciones que hicieron parte de esta, como además diversos grupos de interés alrededor del rol del Instituto en la financiación de la educación superior. Fue de todo ese proceso que surgió el proyecto de Ley de Transformación del Icetex que se presentó al Congreso de la República, el escenario por excelencia donde debe darse la gran discusión de una reforma de esta naturaleza. Por eso es injusto afirmar, como lo han hecho algunos, que no hubo amplia participación de todos los sectores ni tampoco garantías para su participación y discusión.
Como ya lo hemos mencionado, aquí hay un gran tema de fondo –es lo que deberían revisar la ministra de Educación, el ministro de Hacienda y el director del Icetex–, y es la financiación de la educación superior del país. Sería muy conveniente, dadas las circunstancias, aprovechar de una vez por todas, y ante la reforma tributaria que se está preparando, definir un modelo para costear la educación superior del país que combine el pago vinculado al ingreso y que funciona muy bien en países como Australia, con uno en el que ciertos segmentos pueden acceder a crédito educativo, entre otros, para estudios muy avanzados o especializados, y que pueden estar asociados también con la excelencia. Si esta reforma profunda y definitiva no es posible debe, cuanto antes, dada la importancia y coyuntura del país, presentarse nuevamente la reforma del Icetex en el Congreso