Sobrecogedora y terrible una denuncia por violencia sexual, de dos niños de 11 y 13 años contra uno de 7, constatada por el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, ICBF.
Se trata de niños agresores, inimputables, envueltos en un caso de violación en una cancha de fútbol del centroriente de Medellín, lo cual obliga a la reflexión sobre las condiciones familiares, educativas y sociales en las que crecen los jóvenes de algunas barriadas del Valle de Aburrá. Se requiere total acompañamiento a la familia y el niño afectados.