Sony en colaboración con Honda, la alemana BMW y la start-up Holon buscan revolucionar la movilidad en los próximos años. Estas son sus apuestas.
Los avances e innovación en la movilidad automovilística es uno de los temas centrales que este año tiene el Consumer Electronics Show (CES), la feria de tecnología más grande del mundo que por estos días se lleva a cabo en Las Vegas, Estados Unidos.
Sony y Honda
La empresa de tecnología y entretenimiento Sony fue una de las primeras en sorprender. Este miércoles mostró, por primera vez, el prototipo de el nuevo carro en el trabaja en colaboración con Honda. De la sociedad Sony Honda Mobility (SHM) nació la marca de carros AFEELA.
Entre las novedades que tiene este vehículo está que en la parte frontal cuenta con una pantalla que permitirá compartir información con el exterior, más 45 cámaras y sensores dentro y fuera para garantizar la seguridad de los usuarios (promete ayudar a prevenir accidentes).
Durante la presentación del prototipo se informó que SHM planea comenzar a recibir pedidos anticipados a mediados del 2025 y las ventas comenzarán a finales de ese mismo año para iniciar la entrega a partir de la primavera de 2026 en América del Norte.
BMW
El fabricante alemán BMW dio a conocer en el CES su nuevo i Vision Dee, un sedán futurista que es capaz de cambiar hasta de 32 colores diferentes, hacer gestos y convertir su parabrisas en una pantalla.
En cuanto a las características de diseño, este clásico sedán deportivo tiene tres cajas que combinan formas minimalistas.
Además, tiene incorporado el BMW Mixed Reality Slider, una tecnología que le permite al conductor seleccionar qué contenido ver en la HUD (head-up display), la pantalla transparente que se muestra en el parabrisas y permite, entre otras funciones, consultar información relacionada con la conducción, vivir experiencias envolventes de realidad aumentada y mundos virtuales.
Holon
Este vehículo eléctrico y autónomo creado por la empresa Benteler con capacidad de transportar hasta 15 pasajeros. Alcanza una velocidad máxima de 60 kilómetros por hora con autonomía de 290 kilómetros.
Está equipado con una matriz totalmente integrada de sistemas avanzados de cámaras y radares, además con un software inteligente, el cual permite que la conducción autónoma sea una realidad.
Sus usos tienen que ver con el transporte de personas en ciudades, en servicios regulares, pero también con el transporte de mercancías.
