Popularmente siempre se ha conocido a la marihuana como “la puerta de entrada a otras drogas”, pero ahora investigadores de la Universidad de Maryland en Estados Unidos, aseguran que las bebidas energéticas podrían ser la nueva puerta de entrada al consumo de cocaína, según un estudio publicado en la revista Drug and Alcohol Dependence de Elsevier.
La muestra de la investigación contó con 1.099 personas, de las cuales eran 52 % mujeres, 72 % blancos no hispanos desde los 18 años de edad. Los científicos que hacen parte de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Maryland encontraron que los adultos jóvenes que dijeron consumir bebidas energéticas anualmente entre las edades de 21 y 24 años corrían mayor riesgo de consumir cocaína posteriormente, usar estimulantes sin receta médica y presentar problemas de bebida.
El estudio encontró que aquellos que no consumían bebidas energéticas a medida que crecían eran menos propensos a desarrollar problemas de abuso de sustancias.
Las bebidas energéticas son un segmento del mercado en auge. Se ve en la publicidad.
En Colombia las tres marcas líderes de energizantes en el mercado vendieron $240.000 millones anuales, de acuerdo con cifras de 2016 de la consultora en consumo y mercados Euromonitor International.
En América del Norte, según esta misma consultora, las ventas fueron cercanas a los 11.000 millones de dólares, frente a menos de 5.000 millones de dólares de 2007.
Amelia Arria, directora del Centro de Salud y Desarrollo de Jóvenes Adultos de la Universidad de Maryland y sus colaboradores, aseguran que encontraron que aproximadamente uno de cada tres adolescentes y adultos jóvenes estadounidenses consumen bebidas energéticas con el 50 % de los estudiantes universitarios informando que los han tomado en el último mes.
Por su parte, William Dermody, vicepresidente de política de la Asociación Americana de Bebidas, cuestionó la metodología y la exhaustividad del estudio de la Universidad de Maryland y dijo al portal USA Today que esta investigación no prueba causalidad: “Las bebidas energizantes han sido ampliamente estudiadas y se han confirmado como seguras para el consumo por las autoridades gubernamentales de seguridad de todo el mundo, incluida una reciente revisión de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria. Nada en este estudio contrarresta este hecho bien establecido, “que la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos regula los ingredientes y el etiquetado de las bebidas”.
Dermody replicó que las bebidas energizantes contienen aproximadamente la mitad de la cafeína de una taza similar de café y que representan alrededor de dos por ciento de la ingesta de cafeína de los estadounidenses de todas las fuentes.