Tras el foro de sostenibilidad Empresas Responsables, Camilo Abello, director senior de sostenibilidad, habló sobre el caso Grupo Argos en la gestión de asuntos ambientales, sociales y de gobierno. Ética, integridad, responsabilidad y compromiso con el medio ambiente son palabras poderosas que marcan el camino del Grupo Argos. En un contexto que plantea cada vez más desafíos, sabe que es necesario leer el entorno y adaptarse ágilmente a las dinámicas sin perder de vista el foco: gestionar los riesgos, entender hacia dónde va el mundo y trabajar por el bienestar de los territorios y sus comunidades. Para desarrollar sus procesos analizan los impactos y se fijan metas de operación responsable. Su propósito es ir más allá de los rendimientos productivos: cuidar el planeta desde criterios ambientales, sociales y de gobierno corporativo con estándares y metas de alto nivel los hace ir a la vanguardia, ser líderes en su sector y aportar a la construcción de sueños que impulsan el desarrollo y transforman vidas.
Buenas prácticas ambientales
El Grupo Argos tiene un gran objetivo: alcanzar la carbono neutralidad para 2050. Y aunque las buenas prácticas ambientales, para compensar y mitigar, han sido una constante en la organización y se han mantenido por ocho años consecutivos como una de las empresas más sostenibles del mundo según el Dow Jones Sustainability Index, en 2020 comenzaron a trazar una hoja de ruta para materializar esa meta superior. En cuanto al consumo de agua, se propusieron reducir a 2030 el 50 % en términos de intensidad. Desean posicionarse como líderes en la generación eléctrica con energías limpias no convencionales, instalando más de mil megavatios solares y eólicos en los próximos años. En el último lustro sembraron voluntariamente unos 8,5 millones de árboles y para este 2021 su meta es sumar otros cuatro millones más. Esto sin dejar de lado un componente vital: la adaptación a las realidades del cambio climático, que requieren de crear y actualizar continuamente los mapas de riesgo y planes de acción.
Cuidarnos en la dificultad
En el Grupo Argos entendieron que, debido a la pandemia, el país necesitaba aún más de su apoyo y que era el momento de ejercer de forma contundente su ciudadanía corporativa aportando, por ejemplo, más de 10.000 millones de pesos a la red hospitalaria del Valle de Aburrá. Adicional, siguieron desarrollando los programas de la Fundación Grupo Argos y lanzaron una iniciativa para apoyar a la recuperación del país llamada Creamos valor social, para apoyar a los proveedores que se vieron afectados, estableciendo una alianza para el fomento del empleo (con la intención de capacitar a más de seis mil jóvenes) y trabajando en los territorios, vinculándose con proyectos sociales. También impulsaron, con otros actores, la estrategia Hogares Saludables que inició con la pavimentación de pisos de tierra y que ahora se expande con mejoras de vivienda para zonas vulnerables, especialmente de la costa Atlántica. Esperan llegar a 10 mil intervenciones por año es su finalidad.
Compromiso social
Es un asunto que parte del interior del Grupo, con sus colaboradores, a través de la implementación de una serie de políticas y prácticas con criterios de equidad, seguridad y salud ocupacional para alcanzar equilibrio y sanas relaciones. Y es que es el equipo de trabajo el que aporta de corazón a las estrategias y el que experimenta una sintonía entre los valores personales y los de la compañía en ese anhelo por dejarles a las generaciones futuras un mejor planeta. De cara a las comunidades, Grupo Argos tiene una visión clara de sostenibilidad social corporativa y de filantropía, que comienza a materializarse por medio del diálogo cercano con estas y la participación en proyectos que mejoren sus condiciones de vida. Desde la Fundación Grupo Argos buscan aportar a partir de la compensación voluntaria con preservación y conservación de la biodiversidad, y el desarrollo territorial con inclusión social. Además, está el programa de becas del desarrollo que llega en este momento a más de 166 jóvenes
Gobierno corporativo
Implica toda una política de conducta, transparencia y ética, principios inspiradores del Código de Conducta que promueve la integridad y el hacer las cosas bien; un parámetro de comportamiento único para todos los funcionarios y que no solo tiene un impacto interno, sino que se proyecta en el país, en la construcción de confianza con un sector privado que propende por el bienestar común. También, están sintonizados con su Código de Buen Gobierno que los orienta en la búsqueda de mejores tácticas para la toma de decisiones claras y sin conflictos de intereses.