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Los rellenos sanitarios de Antioquia, por ahora, pasan la prueba. Cada año, los 125 municipios del departamento generan 1’129.300 toneladas de basura, las cuales tienen disposición final en rellenos locales y regionales.
Cada año, 1’003.580 toneladas de residuos sólidos se generan en jurisdicción de Corantioquia. De acuerdo con Alejandro González Valencia, director general de esta entidad, en el departamento hay más rellenos para un solo municipio que para varios.
“En nuestra jurisdicción operan 43 rellenos sanitarios, una buena parte son locales (38), es decir, que prestan su servicio únicamente al municipio al cual pertenecen y el resto (5) tienen un carácter subregional, o sea que le prestan su servicio a varios municipios”, explicó.
Lo preocupante es que a la gran mayoría de los rellenos sanitarios locales les queda una vida útil de máximo seis años. “Cada uno de esos rellenos tiene una dinámica propia; sin embargo, podemos decir que el 66 por ciento finaliza su vida útil antes del 2020; esta situación, en el mediano plazo, es crítica”, agregó González Valencia.
Es por eso que la Dirección de Corantioquia hace un llamado a las alcaldías y a las empresas de servicios públicos para que pongan en marcha la identificación de nuevos sitios, la ampliación de los existentes y el mejoramiento de las condiciones actuales.
“Muchos tienen varias deficiencias ambientales que están en permanente requerimiento”, concluyó.
En la actualidad, Cornare ejecuta, junto con EPM, un convenio de cooperación para desarrollar programas de gestión ambiental y social en 16 municipios del Oriente antioqueño.
Este proyecto es posible gracias a una inversión de 15.349 millones de pesos que reunieron entre las alcaldías de estas poblaciones, Cornare y EPM.
Además, ya va a entrar a su segundo año de ejecución, trabaja 13 programas, con los cuales se pretende contribuir al mejoramiento de la calidad ambiental y de las condiciones de vida de las comunidades asentadas en los territorios beneficiados.
Por su parte, la jurisdicción de Corpourabá cuenta con un relleno sanitario regional que brinda servicio actualmente a seis municipios. En esta región todavía hay poblaciones que disponen en botaderos a cielo abierto; sin embargo, se están realizando gestiones para sus cierres definitivos.
En 2011 el relleno sanitario ‘Mariposas Amarillas’ de Jericó fue cerrado. Desde entonces y hasta la fecha, los residuos sólidos de esta población son depositados en ‘El Guacal’, relleno sanitario en Heliconia.
Gracias a la colaboración de algunas alcaldías del Suroeste, como Betania y Titiribí, que ayudaron a evacuar toda la basura de ‘Mariposas Amarillas’, Jericó superó el problema que tenía con su relleno.
“Estamos trabajando, le acabamos de hacer una propuesta a Corantioquia para que podamos reutilizar nuestro relleno como una estación de transferencia temporal ya que, aunque está cerrado, todavía tiene licencia”, afirmó David Alonso Toro Cadavid, alcalde de Jericó.
“Ya adquirimos nuestro propio carro compactador de basura, gracias a una buena gestión con la Gobernación de Antioquia, la empresa privada y el esfuerzo de la Administración Municipal y las empresas públicas de Jericó; este vehículo costó 246 millones de pesos y desde hace un mes está operando al servicio del municipio”, agregó el alcalde.
Antes de que fuese canonizada la Madre Laura Montoya, Jericó producía 75 toneladas de basura mensuales, ahora que es un municipio más visitado (turismo religioso), produce 135 toneladas mensuales.
Este semestre, el gobernador de Antioquia, Sergio Fajardo Valderrama, oficializó acciones de optimización del relleno sanitario de Remedios.
Mientras que en Betulia, en conjunto con el municipio, se realizaron obras para la ampliación de su relleno, con una inversión de 331 millones de pesos, beneficiando a más de 1.300 habitantes.