El pasado 31 de julio, la E.S.E. Metrosalud suspendió temporalmente el pago del salario de sus empleados. A través de un comunicado interno, enviado al medio día de ese sábado, la gerencia de la entidad indicó que a causa de las “dificultades económicas y de iliquidez profunda” por las que atraviesa, la nómina correspondiente a la segunda quincena de julio no podría cubrirse ese día.
“Hoy no se cuenta con la totalidad de los recursos para pagar a los empleados (...) Continuamos con las gestiones tendientes a lograr los recursos y esperamos la próxima semana realizar el pago, no sin antes pedir la compresión ante esta situación”, se lee en aquel comunicado, firmado por la gerente Martha Cecilia Castrillón Suárez.
Aunque según informaron los trabajadores, aquella suspensión fue saldada el pasado 2 agosto, el retraso en los pagos despertó un debate entorno a la situación financiera y los manejos administrativos al interior de ese ente.
Mientras agremiaciones médicas cuestionan la gestión administrativa de la institución y encabezaron desde el pasado lunes una serie de manifestaciones ciudadanas en el Centro Administrativo La Alpujarra, la entidad argumenta que los problemas obedecen a falencias en los procesos de facturación y recursos pendientes adeudados por otras organizaciones.
Las razones
Aunque al cierre de esta edición Metrosalud se había abstenido de pronunciarse públicamente sobre ese problema, a través de dos comunicados internos la gerente Castrillón Suárez sostuvo que las principales razones de la iliquidez de la institución obedecen a problemas organizacionales en el proceso de facturación y la renuencia del Municipio de Medellín a reconocer el pago de algunos servicios prestados.
“A pesar de que el equipo directivo ha realizado un gran esfuerzo por capacitar al personal, tanto del área asistencial como administrativa, a la fecha se observa un desgano total de los servidores dado que solo asisten a las mismas el 30 % del personal convocado, teniendo como consecuencia lógica la persistencia de los errores y por ende la disminución de la facturación y recaudo”, escribió Castrillón (Leer comunicado).
En cuanto al segundo punto, la funcionaria sostuvo que la entidad buscaba que el Municipio de Medellín asumiera el pago de los servicios prestados durante los tres primeros meses de 2020 a los pacientes clasificados como PPNA (Población Pobre No Asegurada).
Así mismo, la gerente señaló que Metrosalud avanzaba en negociaciones con Savia Salud para obtener un “giro de recursos que estaban retenidos”, ante el levantamiento de un paquete de glosas del periodo abril - agosto de 2020.
Cabe recordar que según aparece en los estados financieros reportados por esa entidad a la Contaduría General de la Nación, al cierre de 2020 acumulaba un déficit operativo de $34.762 millones, lo que equivale a un incremento de 319 % en comparación con el déficit de 2019.
Cuestionamientos
Frente a este panorama, agremiaciones como la Asociación Médica Sindical Colombiana (Asmedas) y tres sindicatos de Metrosalud (Asmetrosalud, Sintraommed y Andec) criticaron el rezago en los pagos y cuestionaron la forma en cómo Metrosalud ha gestionado sus problemas financieros.
Germán Enrique Reyes Forero, presidente de la seccional Antioquia de Asmedas, planteó que los errores en los procesos de facturación no eran una explicación suficiente para la demora.
“Creemos que es una mala excusa de la gerente, cuando incluso la administración municipal le acaba de entregar más de $15.000 millones correspondiente a excedentes de EPM”, aseveró Reyes Forero, agregando que la crisis financiera no debería afectar la calidad del servicio.
Por su parte, los tres sindicatos de la entidad publicaron un pronunciamiento conjunto en donde manifestaron que los impactos de la crisis financiera de Metrosalud están recayendo sobre el personal médico, luego de que al menos 71 colaboradores fueran despedidos en diciembre de 2020 y sus funciones recayeran sobre el resto de la planta.
“Nos encontramos, al parecer, en una etapa de marchitamiento institucional”, manifestaron esas tres organizaciones, pidiendo soluciones de fondo por parte del Municipio para sacar de la crisis a la entidad.
Para ampliar las razones expuestas en los comunicados y conocer su versión sobre la crisis financiera, este diario elevó un requerimiento a Metrosalud, pero la entidad expresó que no se pronunciará al respecto.
Por su parte, al ser cuestionado por los recursos que Savia Salud adeudaba a Metrosalud, Luis Gonzalo Morales, gerente de esa EPS, señaló que esa aseguradora estaba al día con sus obligaciones.
Así mismo, reveló que, además de tener una deuda pendiente con la EPS, por concepto del pago de servicios anticipados, Metrosalud mantenía una facturación por debajo de lo esperado (Ver Radiografía).
Aunque la institución logró ponerse al día con la nómina esta semana, las organizaciones médicas anticiparon que continuarán con sus reclamos en busca de soluciones de fondo
$34
mil millones era el déficit de Metrosalud con corte a diciembre de 2020.