Desde antes de que el sistema masivo de transporte entrara en operación, la empresa Metro inició su campaña para sembrar una nueva cultura entre los ciudadanos.
Y a fe que lo ha logrado. Tanto que es otro activo de la entidad. El respeto por el sistema, el sentido de pertenencia y la cultura del usuario son un modelo que hoy se les presenta a otros países con esos sistemas masivos de transporte.
Lea: Metro, 20 años de progreso
El Metro de Medellín la concibe como el modelo de gestión social, educativo y cultural que ha construido, consolidado y entregado a la ciudad.
Pero insiste la entidad en que este modelo puede ser adoptado, total o parcialmente, por otras ciudades e instituciones que tengan como propósito la construcción de una nueva actitud en lo público, que puede ser de civismo, la convivencia en armonía o el buen comportamiento, aunque también pueden ser la solidaridad, el respeto de normas básicas de uso de los bienes para todos, el respeto propio y por el otro, entre otros muchos aspectos.
Otras estrategias han sido programas tales como el Tren de la Cultura o las de fomento de la lectura a partir del Bibliometro y Palabras rodantes. Las apuestas también se enfocan en la programación de conciertos en espacios conexos con las estaciones y eventos de apertura hacia el arte.
En algunos de estos puntos, sin embargo, hay desgaste en la propuesta cuando diversos colectivos culturales y artísticos urbanos han chocado con la empresa Metro. Sostienen que la apertura no es total, pero la empresa sostiene que ante todo el metro es un sistema de movilidad y debe garantizar la tranquilidad al usuario.
Lea: El sistema Metro que nos mejoró la calidad de vida al Valle de Aburrá
Por momentos, hay un comportamiento desesperado de los usuarios en las horas pico, cuando las frecuencias y el número de trenes pareciera no soportar toda la demanda. Hay empujones y críticas.
“Nos llevan como en latas de sardinas”, es una de las expresiones que se escucha con alguna frecuencia entre los usuarios.
Sin embargo es cierto que la Cultura Metro se fue regando por toda la ciudad y entrando a otros espacios públicos que se constituyeron en Medellín.
Son ejemplo de civismo hoy en Medellín el que demuestran los usuarios de los Parques Biblioteca o de los tantos parques recreativos y de esparcimiento que se adecuaron en diferentes espacios de Medellín.
Lea: Metro de Medellín: un sistema multimodal admirado en el exterior
Pies Descalzos, Parque de los Deseos y Arví son algunos de esos ejemplos de verdadero encuentro ciudadano en paz y convivencia.
No son, por supuesto, Cultura Metro como tal, pero tienen características de esa filosofía que generó la empresa Metro de Medellín y su sistema masivo de transporte.