El Metro de Medellín está próximo a iniciar el siguiente quinquenio y el plan de expansión que ejecute tiene que estar articulado a las decisiones de los próximos gobiernos. En ese sentido, la gerencia buscará integrarse a las prioridades en movilidad de quienes sean los próximos alcaldes de Medellín.
Para la empresa, los proyectos prioritarios de expansión a corto y mediano plazo son: el cable de El Picacho, la ampliación de la estación Poblado, el Tranvía de la 80, el cable de la Línea K 2 y el análisis de viabilidad de la Línea C.
Precisamente, este último proyecto, hacer que la Línea C deje ser de servicio (uso exclusivo del Metro) y pase a uso comercial (para los usuarios), es uno de los dilemas más grandes que en estos momentos tiene la administración del Metro.
La gerente del Metro de Medellín, Claudia Restrepo, le contó a EL COLOMBIANO que todavía no se ha tomado una decisión sobre la Línea C. Tienen claro que hay una potencialidad importante, pero la infraestructura de vía férrea está diseñada para grandes demandas y la Línea C no tiene una demanda del tamaño que va a proveer la oferta.
“Hoy la Línea C tiene la prioridad de poder descongestionar la estación San Antonio, pero para eso hay una estrategia más poderosa y más barata: el aumento de flota. Si yo meto más trenes promuevo mayor velocidad para poder hacer los recorridos”, explicó Restrepo.
Además, agregó la gerente, pasar la Línea C de servicio a comercial implica volverla doble línea férrea y eso es muy costoso. Entonces, en esta etapa en la que están, no es que esté descartada la opción de volverla comercial, sino que también están evaluando otras opciones para ese tramo con otras tecnologías.
Sin embargo, uno de los trabajos más fuertes a los que se está dedicando la empresa es el de la viabilidad de la Línea C; hay un equipo completo de profesionales dedicados a realizar estudios permanentes de conexión en esta zona.
“¿Qué es lo que estamos estudiando? Si realmente esta línea férrea es la solución o hay otro tipo de conexión a esas zonas que puedan ser más ligeras y no tan costosas”, aclaró Restrepo.
El personal del Metro que está haciendo los análisis, estudia la demanda de usuarios, flujo, infraestructura, capacidad y eficiencia de la línea.