Andrés Felipe Mera, un payanés que viajó a Medellín por cuestiones de trabajo, se encuentra desaparecido. Su familia, que vive en Popayán, la capital de Cauca, le perdió el rastro desde el 12 de enero pasado. El proceso ya está en manos de la Fiscalía, pero las pistas son escasas.
Andrés Felipe, según información del CTI de la Fiscalía, es robusto, de piel morena, calvo, de rostro redondo, nariz achatada, boca grande y labios gruesos. Usa lentes cuadrados, de ojos grandes, color café. Tiene 35 años. “Es un tipo joven, juicioso”, dice Hugo Guzmán, uno de sus amigos.
Guzmán, desde Tuluá, Valle del Cauca, cuenta que desde el jueves pasado no tienen información sobre Andrés Felipe. “Viajó a Medellín por motivos de trabajo. Ahí se le perdió la pista al hombre. Es su trabajo, suele viajar a otras ciudades”, expresa.
El payanés, según la versión compartida por su amigo, quien dice conocerlo desde los 15 años, se encontraría en Medellín realizando negocios relacionados con criptomonedas. “Se mueve en ese mundo. La compra en bolsa de valores. Criptomonedas, bitcoin, exclusivamente. Viaja a muchas partes”, dice.
Según Guzman, el hombre de 35 años es trabajador, “un tipo normal”, respetuoso, humilde, responsable. “No toma, no fuma. Solo es de buen comer: gordito”. Su esposa e hija, y el resto de la familia de Andrés Felipe, preparan una velatón en Popayán en búsqueda de información sobre su paradero.
En paralelo, en el Oriente antioqueño, las familias de Kevin Andrés Serna Ríos y Jerónimo Monsalve Restrepo piden respuestas de las autoridades. Ambos jóvenes desaparecieron desde hace cinco meses. Se les vio por última vez en el barrio Vegas de la Calleja, en Rionegro.
Todavía no hay pistas sobre su paradero, dicen sus familiares. Los teléfonos 311 326 7877 y 321 380 3365 están habilitados para compartir información que contribuya a encontrarlos. En el caso de Andrés Felipe, el payanés, el celular habilitado por la Fiscalía es el 318 532 4474.
