Desde el 29 de junio no se registra una muerte violenta en Rionegro, el municipio más grande de los 23 que componen el Oriente antioqueño (habitan 116.400 personas según el Censo de 2018, el 20 % de la subregión).
Esto significa que por segunda vez en el actual cuatrienio 2016-2019 el municipio alcanzó 100 días sin homicidios: la racha pasada fue del 28 febrero al 8 de junio de 2017.
Entre el 1 de enero y el 30 de septiembre de este año tuvieron lugar 8 homicidios en esa localidad, 8 casos menos con respecto al mismo periodo de 2018 (reducción de 50%). Así, la tasa se sitúa a la fecha en 6,34 homicidios por cada 100.000 habitantes. En Medellín, con corte al 6 de octubre pasado, la tasa era de 24,78, según la Secretaría de Seguridad.
Acciones contra el crimen
El alcalde Andrés Julián Rendón destacó la implementación de las gerencias contra el delito que funcionan desde 2016. En ellas, explicó, se hace seguimiento a los hechos delictivos de más alto impacto y con un gerente (integrante de la fuerza pública o de la Fiscalía) se analizan los casos y se toman decisiones operativas.
Otra acción que destacó el mandatario fue el fortalecimiento de los frentes de seguridad en la jurisdicción. En 2015, dijo, había siete y hoy existen 150 con más de 7.000 personas que los integran.
“Están conectados vía WhatsApp, con radios y alarmas comunitarias. Son muchos ojos cuidando sus entornos y en constante comunicación con las autoridades”, dijo.
También ponderó el incremento de 32 a 171 cámaras de seguridad y la reposición de la totalidad de luminarias por tecnología LED con 15.335 elementos reemplazados.
“En Rionegro delinquían tres estructuras criminales. A la fecha, están desarticuladas y ninguno de sus integrantes, los que no han sido capturados, delinque en el municipio”, aseguró Rendón.
Comportamiento del hurto
Mientras el robo a personas (-5 %) y a motos (-49 %) presentó una disminución con respecto al año pasado, el hurto a carros (7 %) y a viviendas (28 %) registró un aumento.
El de residencias es un fenómeno que está afectando tanto a la zona rural como urbana. En lo que va corrido de 2019 se han registrado 44 hechos más que en igual periodo de 2018. Según el reporte, una de las tareas que se debe de implementar para mitigar este indicador está enfocada en la sensibilización de la población con planes y programas de prevención del delito.
“Fue el delito común de más incremento en este primer semestre de 2019, por esto la recomendación especial a las distintas autoridades involucradas en la seguridad ciudadana es la de llevar a cabo las actividades necesarias para atacar este fenómeno y así lograr su reducción en el resto del año”, recomendó el Sistema de Información para la Seguridad, la Convivencia y el Control (Siscoa).
Sobre el hurto a personas, se destacó que la implementación de cámaras y la creación de los frentes de seguridad en años anteriores lograron en los últimos dos años que este delito disminuyera. Estos mecanismos, complementó el Siscoa, han permitido una comunicación más oportuna entre la ciudadanía y los organismos de seguridad.
“En términos tanto cuantitativos (este año van 487 casos, 31 más que en 2018) como cualitativos, este sigue siendo el delito de mayor cantidad de casos y mayor impacto social, lo que afecta la percepción de los ciudadanos” finalizó .