El pulso entre el proyecto minero Quebradona que la multinacional sudafricana AngloGold Ashanti (AGA) adelanta en el municipio de Jericó en su etapa exploratoria, y que busca obtener licencia para continuar con la fase de explotación, vive otro capítulo en la agitada controversia entre la minera y quienes se oponen al mismo, por considerar que atenta contra la tradición y la vocación agrícola y turística del territorio.
El nuevo escenario de oposición a la minería viene de Salvemos al Suroeste, un movimiento que logró aglutinar a diferentes organizaciones tanto del territorio como de los niveles nacional e internacional y que busca, entre sus objetivos, lograr 35.000 firmas, a través de la plataforma Change.org, para presionar a que la Anla (Autoridad Nacional de Licencias Ambientales), que tiene en sus manos la decisión final, no otorgue la licencia de explotación.
Uno de los voceros del movimiento, Norman Correa, exdiputado de Antioquia e integrante de la Mesa Técnica del Suroeste, señala que son cinco los objetivos de este colectivo:
1. Generar conciencia sobre lo perjudicial que sería la minería en el territorio.
2. Que esa conciencia se exprese en la firma de la petición en Change.org.
3. Que se les permita participar como terceros intervinientes en los procesos de licenciamiento ambiental que adelanta la Anla.
4. Participar en la próxima audiencia pública que realizará la Anla (sin fecha definida) en el vecino municipio de Támesis, localidad que limita con Jericó y está ubicada a menos de seis kilómetros de la vereda Palocabildo, donde se ejecuta el proyecto minero y que también se siente afectada por los impactos.
5. Responder a la publicidad difundida por AngloGold Ashanti en los diarios nacionales y en las emisoras locales, en las que, dice el movimiento, solo habla de las bondades del proyecto minero.
Las organizaciones
“Nuestro Suroeste ha sido el hogar cálido y generoso de los abuelos y queremos que lo sea de nuestros nietos”, dice Fernando Jaramillo, representante de la organización Alianza Suroeste, una de las voces del manifiesto divulgado la semana pasada.
El grupo lo integran, además, las organizaciones DeJusticia, la ONG internacional ambiental Greenpeace, Visión Suroeste Vive, la Mesa Técnica del Suroeste, la Red de Jóvenes Suroeste 2050, campesinos, los cinco resguardos indígenas Emberá-Chamí habitantes del territorio, la Veeduría JJ Arcila de Jericó; y a nivel nacional, por afinidad en luchas ambientales, el Movimiento Nacional Ambiental con voces desde Cajamarca (Tolima), Santurbán (Santander) y Salento (Quindío).
Afirman, en su argumentación, que “la multinacional minera pretende convertir este territorio en un distrito megaminero, explotando cinco yacimientos de oro, cobre y otros metales, lo que además de acabar con la vocación turística y agrícola, obligaría a miles de familias campesinas a desplazarse de sus tierras”.
La campaña del movimiento dice: “Estamos a tiempo #SalvemosalSuroeste de la megaminería de AngloGold”.
El texto motivacional dice que el Suroeste antioqueño, ubicado en los andes tropicales, “es uno de los puntos de mayor concentración de biodiversidad en el planeta, con una vocación próspera, agrícola y turística, una zona donde la megaminería traería devastadores impactos”.
Una de las voces de rechazo es la de William Gaviria, campesino del corregimiento Palocabildo, citado por la campaña, para quien la única solución viable es “evitar que el proyecto Quebradona se realice y que AngloGold Ashanti se retire del Suroeste, porque la megaminería afectaría nuestra tierra”.
Otra voz es la de Laura Santacoloma, investigadora de la línea Justicia Ambiental de Dejusticia, quien dijo que “los proyectos que impactan con tal magnitud los territorios deben contar con procesos que garanticen que las voces de sus habitantes sean escuchadas para proteger efectivamente sus valores naturales, culturales y el derecho fundamental al agua”. En esta misma línea se mueven la mayoría de conceptos que rechazan el proyecto minero citados por los promotores de Salvemos al Suroeste.
La voz de AngloGold
Pero AGA se defiende. El 28 de noviembre de 2019, la minera presentó ante la Anla el EIA (Estudio de Impacto Ambiental), que contiene ajustes realizados a un primer estudio y que fue devuelto por la entidad nacional solicitando ajustes y nuevos requerimientos.
El presidente de la multinacional, Felipe Márquez Robledo, destacó que el EIA es un estudio serio, con criterio técnico y científico y que tiene en cuenta componentes ambientales y sociales.
“Los exhaustivos análisis y el diálogo con la comunidad, junto a la tecnología de avanzada que tenemos proyectado utilizar, nos permiten contar con la certeza de que el EIA no solo integra los componentes requeridos por las autoridades para asegurar el cumplimiento de las especificaciones técnicas y las obligaciones sociales y ambientales del proyecto, sino que refleja altos estándares internacionales de minería sostenible para garantizar que cumpla el propósito de convertir la riqueza mineral del territorio en progreso social, económico y ambiental”.
El gerente de Asuntos Corporativos de AngloGold Ashanti, Juan Camilo Quintero, respondió que el proyecto Quebradona es técnico y sustentado con datos científicos.
Señaló que para la elaboración del EIA la compañía reunió la información acumulada durante 14 años de exploración en el territorio (llegó allí en 2006). “Detrás de este proyecto hay más de 1.300 personas con estudios hidrológicos, bióticos, abióticos, sociales y de geología”, dijo.
Por esta razón pide que las discusiones en torno a Quebradona y el EIA se centren en estudios técnicos y científicos que respalden las afirmaciones que se divulguen.
Hay que decir que el movimiento Salvemos al Suroeste sustenta su lucha y objetivos basado en un estudio ambiental realizado por Comfama, entidad que proyectaba construir un centro turístico en Támesis, pero tras conocer el proyecto minero abandonó la idea por considerar que el lugar no era compatible con la minería. El estudio de Comfama tomó como base el EIA de AGA para rebatirlo.
Quintero aseveró que la minería es un renglón generador de riqueza si se ejerce con proyectos bien planeados, que respeten los aspectos sociales, ambientales y antropológicos de los territorios como, consideró, lo hace Quebradona.
“La minería puede ser fuente de riqueza para las regiones y ayudar a disminuir las migraciones hacia las capitales y áreas metropolitanas de los habitantes de los pueblos”, que es un fenómeno muy propio de Colombia y generador de pobreza, advierte.
La mina está ubicada en la vereda Cauca y el corregimiento Palocabildo. AngloGold calcula que una vez obtenida la licencia de explotación podrá extraer 4,91 millones de toneladas de concentrado de cobre, 6,13 millones de onzas de oro, 85,1 millones de onzas de plata y 70,08 kilotones de molibdeno. En 2015, el Proyecto fue declarado por el Gobierno como de interés nacional.
Aunque Quintero sostuvo que su compañía es respetuosa de los tiempos de la Anla, espera que a finales de este año o principios de 2021 la compañía minera ya tenga en sus escritorios la respuesta positiva del ente nacional.
“Siempre hay voces que no están de acuerdo y nos podemos sentar en las mesas a discutir y a argumentar, pero por ejemplo, cuando afirman que las aguas se van a acabar, no hay ningún sustento o estudio específico que respalde dichas afirmaciones”, aseguró.
Concluyó que si hay estudios que demuestren que el proyecto está causando impactos negativos, la AGA está dispuesta a reformularlo siempre que sean sustentados desde lo técnico .
OPINIONES DE LA CAMPAÑA DE SALVEMOS EL SUROESTE
Rafael Aubad
Promotor aeroparque en la región
“He estudiado responsablemente el proyecto de la minera y con total certeza y responsabilidad puedo decir que es inconveniente para la conservación de las aguas, el paisaje, la agroindustria y el ecoturismo en el Suroeste y por eso los invito a unirse este movimiento en defensa de la región”.
Sergio Fajardo
Exgobernador de Antioquia
“El proyecto minero es un atentado, un error gigantesco, no hay riqueza en minerales que pueda pagar el valor de la cultura, la naturaleza y lo que significa para el Suroeste la riqueza de Jericó y lo que está a su alrededor. Unos dólares jamás pagarán lo que tomó años construir”.
Juanes
Cantante
“¿Podemos negarles a los pueblos, a las comunidades, y a los territorios escoger su modelo de riqueza? Si ya viven de la agricultura, el turismo, la biodiversidad y su cultura, ¿podemos negarles su vocación e imponerles la minería de Anglo Gold Ashanti a la fuerza?”.
Noel Londoño Buitrago
Obispo de la Diócesis de Jericó
“Digo que minería sí, pero no así (a gran escala), ni aquí. No nos pueden asegurar que el peligro es cero y por el pan de hoy no podemos poner en riesgo el pan futuro. Desde un escritorio en Bogotá no se puede decidir la suerte de los que viviremos eternamente aquí”.
Catalina Mesa
Directora de cine
“Invito a los que toman las decisiones en el país a que oigan los argumentos de porqué los costos ambientales y sociales serían mucho más grandes que los beneficios de un distrito megaminero y respetar el sentir de los habitantes. No podemos vender nuestras montañas”.
Sebastián Restrepo
Visión Suroeste
“En el Suroeste los habitantes y campesinos hemos vivido de la vocación agrícola, cultural y turística. La multinacional sudafricana pretende imponernos un modelo de desarrollo que rechazamos y que no está alineado con nuestra visión de desarrollo regenerativo”.
Ricardo Uribe
Agroempresario
“El gobierno ve la megaminería para la reactivación económica por las regalías, pero estas representan un porcentaje bajo del PIB. En el Suroeste el aguacate generará 4.000 empleos y 78 % de ingresos de un agricultor se quedan en la región, con la minería no es así”.
Azucena Restrepo Herrera
Proantioquia
“Decidimos constituirnos como tercero interviniente ante la Anla. Nuestra participación estará basada en el interés superior de un desarrollo sostenible, la construcción de valor público a nivel nacional y territorial y el fortalecimiento institucional de las decisiones públicas”.
Ricky Vélez
Empresario y deportista
“El Suroeste es el sitio más espectacular que conozco para practicar el turismo de aventura, involucrar las regiones y hacer deporte. La minería va a acabar con todo este paraíso, hay que proteger a Támesis, Jericó y todos los municipios que conforman este territorio”.
Cecilia Faciolince de Abad
Habitante de Jericó
“Estas palabras para pedirles que por favor no hagan la mina en este lugar que para nosotros es sagrado, por su fauna, flora, sus antepasados y todos los campesinos se han dedicado únicamente a la agricultura.Quiero que mis nietos conozcan esta riqueza”.
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hectáreas de cuatro predios es el área de intervención del proyecto: AGA en su web.