Sucedió hace 25 años
1989

Berlín es una fiesta

Los alemanes quieren que la caída del Muro no sea tan solo un efecto político sino real. Los jóvenes, estrechamente vigilados por soldados de Alemania Oriental, abrieron agujeros para luego introducir cadenas que, jalonadas por un jeep, sirven para arrancar trozos del Muro.

Mientras algunos alemanes siguen celebrando desenfrenadamente la apertura de las fronteras entre Alemania Oriental y Occidental, el canciller de Alemania Occidental, Helmut Khol y el líder comunista de Alemania Oriental, Egon Krenz, conversaron telefónicamente, un primer paso de acercamiento real entre las dos naciones, divididas artificialmente como consecuencia de la Segunda Guerra Mundial.