RED, de Robert Schwentke

Acción, humor y espionaje con estilo

Por: Íñigo Montoya


En el cine no existen leyes que determinen la forma de hacer buen cine o mal cine. De ser así todas las películas serían obras de arte y/o éxitos de taquilla. Con esta película se puede comprobar esa premisa, pues tiene todos los elementos típicos del cine comercial más gastado y predecible, pero aún así, resultó ser una entretenida y divertida cinta que alcanza a sorprender al espectador.
Es un filme que combina los populares géneros de la acción y la comedia, los cuales siempre resultan difícil mezclar a la hora de mantener la tensión y verosimilitud que requiere la acción, al tiempo que poseer la chispa de gracia que exige la comedia. Esta película consigue tener éxito con dicha combinación sin afectar las cualidades de cada género. Y hablando de géneros, hay uno de ñapa: el cine de espionaje.
Así que tenemos tres esquemas por vía de los géneros: acción, comedia y espionaje. Pero hay uno más por cuenta del argumento: el esquema de “solos contra el mundo”, donde el antagonista es una gran conspiración del gobierno.
Como se puede ver, todo parece conocido y poco original, sin embargo, los realizadores supieron presentar esos elementos de una manera original y divertida. Entre tanto lugar común de sus componentes consiguen hacer unas variaciones ingeniosas y unos giros que sostienen la atención y el interés.
Pero tal vez lo más atractivo de todo es ese reparto de súper estrellas: Bruce Willis, Helen Mirren, Morgan Freeman, Mary-Louise Parker y John Malkovich, todos ellos (un poco menos Willis) interpretando unos personajes, incluso un tipo de cine, en los que nunca se les ve y aquí lo hacen con gran naturalidad y eficacia.
No es una obra maestra, ni entre sus líneas se puede leer el significado de la existencia, pero sí es una cinta que casi cualquier espectador que no tenga prejuicios para con el cine comercial, va a disfrutar y gozar muchísimo.