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2.353 presos transitorios pasarán a las cárceles
Los reos pasarán de la congestión en los calabozos, al hacinamiento de siempre en prisión.
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En la Regional Noroeste, a la que pertenece Antioquia, trasladarán 390 internos transitorios a las cárceles. FOTO esteban vanegas
Recibir en las cárceles a 2.353 internos que están apretujados en los calabozos de Fiscalías, estaciones de Policía y despachos judiciales, es la meta propuesta por el Inpec para esta semana.
Así lo anunció el director de la institución, general Jorge Ramírez, tras el cese de la Operación Reglamento que el Sindicato del Cuerpo de Vigilancia y Custodia del Inpec había implantado desde agosto del año pasado, negándose a recibir más presos en 23 establecimientos penitenciarios.
Este fin de semana, gracias al acuerdo logrado el sábado entre el Gobierno y los sindicalistas, trasladaron a 288 internos transitorios a sus celdas, la mayoría en Bogotá (47).
De los que faltan, 1.016 serán reubicados en las prisiones de la Regional Central del Inpec, 450 en la Occidental, 390 en la Noroeste, 189 en la Oriental, 188 en la del Viejo Caldas y 120 en la Norte.
El acuerdo se dio en un momento crítico. Un día antes, la Defensoría del Pueblo había denunciado que, tan solo en la Capital, había 667 personas hacinadas en las Unidades de Reacción Inmediata de la Fiscalía y 666 en estaciones policiales (1.333 en total), de las cuales a 62 les habían dictado detención domiciliaria y debían estar en sus casas, y 20 más tenían enfermedades tan graves como VIH, cáncer y tuberculosis.
“Dimos prioridades a personas enfermas, que estaban en los CAI, en buses de la Policía, a aquellos que por su situación médica sean ingresados a los establecimientos carcelarios para que les presten atención médica inmediata”, dijo Ramírez.
En la actualidad, en Colombia hay 113.778 presos en cárceles, cuya máxima capacidad es de 77.874 cupos. Esto arroja un índice de hacinamiento del 46%, que asciende a 52% si se toma en cuenta la sobrepoblación en los sitios transitorios.
El ministro de Justicia, Yesid Reyes, celebró el acuerdo con el sindicato, exclamando que “lo que se firmó es un compromiso de las partes para seguir trabajando unidas por el mejoramiento de la situación en la que está la población carcelaria”.
En el texto del acuerdo laboral, los sindicalistas aceptaron la oferta del Gobierno, de destinar $12.700 millones para un incremento porcentual del sobresueldo de los guardianes, una póliza de vida a cargo del Estado y un crédito para vivienda, entre otras medidas.
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