El 5 de junio –dos días antes del intento de magnicidio contra Miguel Uribe Turbay– el presidente Gustavo Petro tomó su teléfono y escribió en su cuenta de X 19 palabras cargadas de acusaciones infundadas contra el senador opositor del Centro Democrático.
“¡Dios mío! ¿el nieto de un presidente (Julio César Turbay Ayala) que ordenó la tortura de 10.000 colombianos, hablando de ruptura institucional?”, se lee en el mensaje que todavía está visible en la red social del Jefe de Estado.
Las cifras entregadas por X dan cuenta de que esa publicación fue vista por al menos 2.1 millones de usuarios, recibió 3.000 comentarios y fue compartida en 4.000 ocasiones. Fue el último de los 43 trinos en los que el presidente atacó al precandidato.
Esa subida de tono del mandatario ocurrió porque Uribe Turbay había anunciado que se opondría –a la hasta hace poco punzante– intención del Gobierno de convocar a una consulta popular vía decreto.
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“Nosotros no nos vamos a rendir y le pedimos a ustedes que tampoco lo hagan. No podemos caer en los juegos de intimidación y amenazas de este Gobierno. Lo que está en juego es Colombia y la vamos a defender”, era el tono usado por el senador.
Pasaron 48 horas, el opositor estaba en un mitin de campaña en el barrio Modelia de Bogotá y un adolescente de 15 años accionó una pistola Glock 9mm contra su humanidad.
Desde entonces permanece bajo pronóstico reservado en una Unidad de Cuidados Intensivos de la Clínica Santa Fe, cuatro personas han sido capturadas y la Fiscalía todavía trata de dar con el paradero de los autores intelectuales del crimen.
El abogado Victor Mosquera Marín, defensor de la familia Uribe Turbay, apareció sobre las escaleras de la clínica este 24 de junio y anunció que abrirán otro frente legal: denunciaron al presidente Gustavo Petro por su aparente hostigamiento contra el líder opositor.
La denuncia de 7 páginas fue conocida por EL COLOMBIANO y ya está radicada ante la Comisión de Investigación y Acusación de la Cámara de Representantes.
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“Durante los últimos tres años el presidente ha venido realizando discursos estigmatizantes y de odio contra Miguel Uribe Turbay. Generó un ambiente hostil, discriminatorio y de odio”, apuntó Mosquera.
El defensor aclaró que su denuncia no pretende vincular las expresiones del mandatario con el atentado. Pero advirtió que el presidente es uno de los responsables de la crispación política que ha incluido mensajes de odio.
“Ha sido absolutamente irresponsable en sus señalamientos contra los líderes de la oposición”, afirmó Mosquera.
2.1
millones de usuarios en X vieron el último ataque de Petro a Miguel Uribe Turbay.
El debate
Los 18 representantes de la Comisión de Acusación de la Cámara, juez natural del presidente, deberán alistarse para definir si abren o no una investigación formal contra Gustavo Petro.
De entrada, el delito de hostigamiento está enmarcado en el artículo 134B del Código Penal y se define como la responsabilidad de quien promueve actos, conductas y comportamientos orientados a causar daño físico o moral a una persona por varias razones, entre esas, la orientación política o ideológica.
En Colombia ese delito es castigado con penas de entre 12 y 36 meses en prisión y multas de hasta 15 salarios mínimos.
Petro es, de lejos, la figura política que más ha usado la red X para emitir discursos agresivos. La banda presidencial es también un parlante que, parece, no se ha usado con responsabilidad.
La Silla Vacía analizó, por ejemplo, 59.964 trinos escritos por figuras políticas entre enero de 2024 y el 5 de junio de 2025.
Los filtró con la herramienta de la Inteligencia Artificial hateval2019semeval, usada por Meta para identificar discursos agresivos. Encontró que Petro, en al menos 409 ocasiones, emitió discursos agresivos, fue seguido por Vicky Dávila en 286 ocasiones.
“Las manifestaciones que hace el presidente –si bien en principio están protegidas por la libertad de expresión– cuando cruzan los límites penales, en este caso el aparente delito de hostigamiento, claramente tiene limitaciones e incluso podría suponer responsabilidades”, señaló Alejandro Gómez Velásquez, profesor titular de la Escuela de Derecho de la Universidad EAFIT.
El dosier construido por el abogado de Uribe Turbay y que ya reposa en los escaños de los 18 representantes da cuenta de al menos 43 mensajes escritos de manera ofensiva por el presidente contra su opositor.
El mandatario usó calificativos como “régimen del terror”, “los crímenes del uribismo” y “la herencia paramilitar” para referirse a Uribe Turbay.
“El uso del discurso no es inocuo ni neutro cuando proviene del poder: construye realidades sociales, estructura el marco cognitivo de la población y puede habilitar, directa o indirectamente, escenarios de exclusión, agresión o violencia física”, añadió el abogado Mosquera.
El fallido intento por calmar las aguas
Este 16 de junio la Curia Arzobispal de Bogotá recibió a todas las cabezas de los poderes públicos en un almuerzo convocado por el cardenal Luis José Rueda.
El motivo del encuentro era armar una estrategia para “desarmar la palabra” en medio del ambiente hostil y violento que rodea al país.
Monseñor Rueda aseguró que la reunión tuvo un clima tranquilo y que todas las partes estuvieron dispuestas a dialogar y encontrar puntos comunes en medio de sus diferencias. Los efectos de esa convocatoria, parece, duraron poco. El sábado pasado el presidente armó tarima en la plazoleta de La Alpujarra en Medellín, puso en primera fila a los capos de las bandas criminales con los que negocia la paz urbana y desde allí atacó a líderes opositores.
Este miércoles, cuando se enteró del proceso penal que podría iniciar en su contra, afirmó que devolverá la denuncia.
“Hay una operación que intenta vincular a Iván Cepeda al narcotráfico, que viene de acusados por el senador y hay un intento de señalarme mediáticamente como responsable del atentado al senador Uribe, por el abogado que viene del mismo sector político que los calumniadores de Iván Cepeda. He decidido poner denuncia por calumnia a quien me calumnia”, señaló Petro.
En esta misma línea, el ministro del Interior, Armando Benedetti, cuestionó los argumento del abogado de Uribe Turbay.
Para Benedetti, el Gobierno ha sido uno de los principales afectados por este atentado. Por ello, sostuvo que no se puede descartar que haya sido para desestabilizar las gestiones de la administración Petro.
“Si hay alguien que le ha ido mal aparte de Miguel Uribe y su familia con el atentado contra Miguel Uribe es el Gobierno Nacional, está en las encuestas. Eso debilita al gobierno en cualquier parte del mundo”, señaló.
Para el ministro, esta denuncia es un acto “perverso” que no debería hacerse porque el presidente Petro “siempre ha respetado la oposición y no ha hablado nada contra el senador Miguel Uribe”.
“No hay un colombiano que me pueda mostrar un trino en que el presidente haya atacado a Miguel Uribe después del atentado. No hay ningún trino”, señaló.
En efecto, desde que ocurrió el atentado, el presidente ha pedido la pronta recuperación de Uribe Turbay: horas después del crimen hizo una alocución en la que calificó a su opositor como un “hermano de sangre”.
Desde el Gobierno adelantaron el Plan Democracia para reforzar la seguridad de 41 ciudadanos –varios de ellos opositores– que han manifestado su interés de participar en las elecciones del próximo año. Destinará 400.000 millones de pesos, 500 vehículos y más de mil efectivos de la Policía y la Unidad Nacional de Protección (UNP).
Lo cierto es que el abogado Marín pidió a los representantes que le den trámite “urgente a su denuncia” debido a la gravedad en el estado de salud de su cliente.
“En este caso particular, la insistente narrativa impulsada por el presidente Petro sobre la supuesta peligrosidad ideológica de Miguel Uribe Turbay ha contribuido a consolidar un entorno hostil, social y político, que configura un riesgo evidente para su seguridad personal. La prueba más contundente de ese riesgo se materializó en el atentado reciente contra su vida, el cual no puede analizarse de forma aislada, sino dentro del contexto de progresiva deshumanización discursiva que lo antecedió”, apuntó el abogado.
18
representantes de la Comisión de Acusación decidirán si abren o no la investigación a Petro.
La huella digital que dejó el presidente
Una de las pruebas entregadas en la Cámara de Representantes es un documento de 20 páginas que recogió los trinos que realizó el presidente Petro contra la dignidad de Uribe Turbay entre febrero de 2023 y junio de 2025.
“Las publicaciones no son aisladas ni casuales, sino que constituyen una secuencia organizada y reiterada de expresiones estigmatizantes, con referencias directas o indirectas a la figura del senador, presentándolo como responsable de crímenes históricos, vocero de agendas antipopulares o símbolo de corrupción”, detalló el abogado Marín.
Los mensajes del presidente ocurrían justo después de las intervenciones de Uribe Turbay en el Senado o en medio de momentos de coyuntura política.
En la lista de publicaciones está un trino del presidente del 1 de mayo.Fue una respuesta a una crítica de Miguel Uribe sobre la consulta popular, radicada ese día por el jefe de Estado.
“¿Vas a llevar, Miguel Uribe, como tu abuelo, a diez mil colombianos a la tortura para frenar al pueblo? Ya no podrás, el pueblo se ha decidido”, escribió.
En junio del 2024 Petro fue criticado por pronunciarse sobre la guerra en Franja de Gaza y, al parecer, guardar silencio por la arremetida violenta de los grupos ilegales en Colombia.Ahí volvió a arremeter contra su opositor.
“No le gusta a Miguel Uribe Turbay que proteste por esto porque es lejos de Colombia. Tampoco le gusta que proteste por los 6.402 jóvenes que asesinaron en Colombia con balas oficiales porque es muy en Colombia y fue por el gobierno que defiende”, apuntó Petro.
El mandatario también acusó al opositor del 39 años de ser el responsable de un “saboteo” contra el proyecto de Hacienda.
“Después que el Centro Democrático saboteó la ley de financiamiento, donde se rebajaban los impuestos a todas las empresas y a la clase media, sale asustado a mirar las consecuencias de sus actos (sic)”, posteó Petro ante la advertencia del congresista de que Colombia estaba por primera vez al borde de la quiebra.
Otros de los señalamientos hacia la bancada de oposición del Congreso han sido en plaza pública: “Si los amigos de Efraín Cepeda niegan la consulta popular, el pueblo borrará a esos congresistas de la historia de Colombia”.
Una de las disputas entre Petro y Uribe Turbay ha sido por la postura del presidente respecto a temas de ciudad en Bogotá, donde el senador indicó que era el mismo jefe de Estado quien no había permitido el avance de obras en la capital.
“Se le olvidó al señor Uribe Turbay que él mismo propuso hundir el Plan de Ordenamiento Territorial de Bogotá, que en el 2013 buscaba adaptar la ciudad al cambio climático. Dijo en ese momento que no existía la crisis climática y logró hundirlo en el concejo (sic)”, fue lo que le respondió el mandatario al congresista argumentando sin pruebas que “ponen en peligro la vida de las niñas y niños y ciudadanos que usan la autonorte solo por codicia, solo por el interés corrupto de aumentar las ganancias de la concesión vial”.
Los ataques no sólo han sido específicamente al senador, pues también ha lanzado señalamientos e insultos hacia el Centro Democrático.
“Este es el típico uribismo. Señalar a las personas por su manera de pensar y olvidar que en Colombia hay quienes, después, aprietan el gatillo”, le respondió el pasado 28 de diciembre a la precandidata Vicky Dávila sobre cuestionamientos respecto al uso de los recursos públicos.
El debate quedó abierto y la Comisión de Investigación y Acusación de la Cámara deberá decidir si pone freno a las diatribas del presidente o, si por el contrario, considera que sus mensajes hacen parte del mero debate político.
El proceso en la Comisión de Investigación y Acusación de la Cámara
La Comisión de Investigación y Acusación de la Cámara está conformada por 18 representantes de distintos partidos: curules de paz (2), Liberal (3), Pacto Histórico (3), Conservador (3), Centro Democrático (2), Alianza Verde (2), Cambio Radical (1) y la U (1). Los miembros de esa célula legislativa deberán decidir –después de la investigación y de recoger las pruebas– si hay fundamentos para continuar el proceso.
“Si ellos consideran que hay elementos suficientes, pasa a la plenaria de la Cámara y si la plenaria de la Cámara, por una votación mayoritaria, considera que hay razones suficientes para acusar al presidente, ya pasaría a una comisión del Senado, que es la Comisión de Instrucción, y finalmente sería el Senado de la República, en su plenaria, el que establecería la destitución del presidente del cargo”, explicó el abogado Alejandro Gómez Velásquez.
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trinos agresivos fueron escritos por Petro entre enero de 2024 y el 5 de junio de 2025.
