Norman Julio Muñoz, quien se desempeñaba como superintendente nacional de Salud, renunció a su cargo argumentando que desempeñará otras funciones y que lo hace para que avance la investigación que cursa en su contra en la Procuraduría, por haber permitido la operación de la EPS Medimás, el 1 de agosto del año pasado, y no haberla intervenido, como lo ordenó el ente de control.
“Me permito informar que he presentado la renuncia de manera voluntaria al cargo que desempeñé por más de tres años para continuar con un nuevo proyecto laboral y permitir que el proceso que adelanta la Procuraduría General de la Nación siga su curso sin que se afecte el funcionamiento de la entidad”, se lee en un comunicado en el que dio a conocer la noticia.
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Muñoz estuvo en el cargo durante cerca de tres años y actualmente estaba suspendido por la Procuraduría, por las razones anteriormente expuestas, pero la sanción fue extendida por tres meses más a principios de enero.