Con el objetivo de prevenir escenarios que afecten a los pacientes y de revisar cualquier anormalidad, la Contraloría Delegada para el Sector Salud arrancó formalmente un seguimiento permanente a la liquidación de la EPS Medimás.
Dicha decisión de desaparecer la EPS fue ordenada por la Superintendencia Nacional de Salud el pasado 8 de marzo tras encontrar “pasivos que ascienden a más de 2,3 billones de pesos”.
En ese momento, la Superintendencia dijo que el Ministerio de Salud tendría que reubicar a sus más de 1,5 millones de pacientes, ubicados en 232 municipios de 14 departamentos, en otras EPS receptoras. Dicho proceso de traslado se inició desde el pasado 14 de marzo y aún continúa.