La presunta alianza con la que el ELN se habría financiado con recursos públicos de la Gobernación de Arauca tiene un nuevo capítulo que esta vez salpica a Luis Emilio Tovar, exalcalde de la capital de ese departamento.
EL COLOMBIANO conoció que en 2015, en calidad de mandatario municipal, Tovar contrató por $3.959 millones a un consorcio en el que Jhonny Alexander Bello, señalado de ser integrante del ELN, era el representante legal de una de las empresas.
El caso abre la incógnita de si el exalcalde –familiar del hoy mandatario Édgar Tovar– financió al grupo guerrillero a cambio de protección, como se lo señaló la Fiscalía al gobernador de Arauca, José Facundo Castillo, y a su antecesor, Ricardo Alvarado, ambos imputados y con medida de aseguramiento por supuestos nexos con el ELN.
En efecto, Castillo fue capturado la semana pasada por haber suscrito varios contratos precisamente con Bello, alias “el Gordo Jhonny”, quien apunta a ser el enlace estrella que utilizó el ELN para adentrarse en el poder local y así ganar plata en una zona en la que tiene fuerte presencia.
Este diario revisó el contrato firmado por la alcaldía de Tovar y el Consorcio Semillas Arauca, y encontró que además de la participación de alias “el Gordo Jhonny”, este tiene inconsistencias por incumplimientos que han sido documentados por la Contraloría y que, a día de hoy, no están resueltos.
El exalcalde habló con este diario y aseguró que si bien es un hecho inevitable que en su alcaldía se contrató a un consorcio con participación de “el Gordo Jhonny”, él nunca supo que este tuviera nexos con el ELN, ya que a Bello “lo capturaron en el año 2019”, y el contrato se firmó en 2015.
Además, afirmó que nunca se reunió con el presunto guerrillero porque el representante legal del consorcio era otro: Juan David Quintana, y añadió que hace un mes declaró en versión libre en el proceso de responsabilidad fiscal que por el incumplimiento del contrato les abrió la Contraloría a él y las firmas que conforman el consorcio.