Pese a que la piel de perros y gatos, en su mayoría, está cubierta por el pelaje, esta puede sufrir problemas dermatológicos que, al igual que a los humanos, les causa incomodidad y deben ser tratados.
María Soledad González, médica veterinaria del Centro de Veterinaria y Zootecnia de la Universidad CES, explica que los perros padecen de alergias, debido a que tienen contacto con materiales como telas y otros sintéticos.
Señala que pueden sufrir de dermatitis. La razón es que hay algunas bacterias que se establecen en su dermis y en el peor de los casos, producen infecciones.
Paula Villegas, especialista clínica en Medicina de Caninos y Felinos y veterinaria de la Universidad de Antioquia, comenta que las afecciones más comunes son las dermatitis alérgicas a la picadura de pulga, de mosquito y de garrapata, además de alergias a componentes del ambiente, que se denomina atopia canina o felina.
En el caso de los gatos, los hongos son el mayor problema. La médica González añade que la gran mayoría de mascotas heredan este tipo de hipersensibilidades. El veterinario debe ser quien determine la causa y su tratamiento.
Paula Villegas precisa que los dueños consultan básicamente porque el paciente huele raro, se le cae mucho su pelaje, se ha quedado alopécico (calvo) en alguna área o porque se rasca demasiado, en este último caso pueden llegar a hacerse heridas.
¿Cómo cuidarlos?
González resalta que en muchos casos no hay forma de evitar los problemas dermatológicos de estos animales, pero algunos se pueden prevenir: mantener limpios los diferentes espacios de la casa y bañar a los peludos de manera frecuente, sin excederse.
Por otro lado, menciona que la comida también influye para que los amigos de cuatro patas mantengan la piel más sana. La alimentación es vital y los concentrados deben contener buenas fuentes de proteínas, vitaminas de buena calidad y algunos minerales como el zinc.
En eso está de acuerdo Villegas, quien comenta que si no hay una nutrición adecuada, la piel demuestra deficiencias de algún nutriente.
Acudir a un experto
Ambas profesionales recomiendan usar productos recetados por el médico veterinario, hacer control de pulgas y garrapatas así no se vean en la piel del paciente.
Si ya está instalada una enfermedad acudir a la consulta y a las revisiones, debido a que mantendrán controlado el proceso. La mayoría de dolencias alérgicas no tienen cura, pero si se realiza un control frecuente se pueden evitar.
Los tratamientos tópicos son el pilar de la dermatología, los más usados son: champús, acondicionadores y algunos productos en presentación de spray o lociones fluidas.
Sin embargo, Paula Villegas aclara que todo tratamiento depende de la valoración del veterinario y es individual para cada paciente.
Por su parte, María Soledad González sugiere acudir a profesionales especializados en el tema, es decir dermatólogos. La razón es que estos pueden descubrir lo que ocurre con mayor facilidad.
Hay que buscar ayuda con inmediatez cuando la picazón es constante y esto incluye lamido persistente, el rascado, el mordisqueo y verlos frotarse contra objetos, lugares o personas. El eritema (enrojecimiento de la piel), otitis constantes, que se pueden tratar pero regresan rápidamente, caída profusa de pelo aunque el paciente no esté en su muda fisiológica y mal olor en pacientes que los bañan son otros síntomas . n