Por JHEYNER A. DURANGO HURTADO
Cuando tenía 15 de edad, Antonina Moya partió del municipio urabaense de Vigía del Fuerte impulsada por el deseo de convertirse en una de las mejores pesistas del país.
Le dolió dejar a sus padres, pero dos años después la antioqueña recoge los frutos a su esfuerzo y sacrificio.
En el Campeonato Panamericano sub-17 de la especialidad que se disputa en Palmira, Valle del Cauca, su superioridad fue tan clara, que hasta la directora de Coldeportes Nacional, Clara Luz Roldán, mostró su emoción en las redes sociales: “¡Grande Antonina Moya. Oro en arranque, envión y total”, escribió.
La deportista fue dominadora absoluta de la categoría de los 58 kilogramos, título que la pone en carrera para ganarse un puesto en el combinado colombiano que actuará en los Juegos Olímpicos de la Juventud en Buenos Aires, Argentina, 2018.
Pero si la antioqueña de diminuta figura impresionó con su fortaleza física y mental, sus compañeros José Osorio y Hárrinson Hurtado también aportaron al gran dominio del país en el certamen.
Osorio se quedó con los tres metales de oro en los 62 kilogramos y Hurtado fue el mejor en los 69.
Con esta presentación, los pesistas locales hacen la fiesta en el Panamericano al sumar 18 preseas doradas.
La senda victoriosa la esperaban continuar ayer Karoll Palacio y Julieth Rodríguez, en 63 kg, Jorge Riascos, en 85, y Carolina Gómez, en 69.
