Sin desconocer la importancia de las otras posiciones del campo, en la final de la Copa Libertadores se tiene que resaltar el papel de los arqueros y delanteros.
Máxime en esta instancia, en la cual se necesita de la concentración total en ambos puestos que, por ser juegos tan cerrados, un error o un acierto definen los títulos.
En esta fase de la Libertadores hay que resaltar el papel fundamental que pueden cumplir hombres como Franco Armani y Miguel Borja, por Nacional; Librado Azcona y José Angulo, por Independiente del Valle.
Arqueros con bagaje
Azcona y Armani rondan los 30 años. Además, han atajado más de 200 partidos y son líderes en sus equipos.
1. Azcona, el atajador que no se complica
Para el exportero verdolaga, Andrés Saldarriaga, el paraguayo nacionalizado ecuatoriano ha mostrado un nivel superlativo a lo largo de la competencia, sobre todo en los octavos de final ante River Plate: tuvo 19 atajadas.
“Es un arquero que se ubica muy bien, maneja a placer el área chica y ha demostrado muchas habilidades”, argumenta Saldarriaga.
A la hora de buscarle un defecto, Andrés cree que no es dúctil con el balón en los pies, aunque reconoce que es práctico y no se complica.
“Conoce muy bien sus debilidades y trata de corregirlas, se vuelve muy práctico. Además, ser capitán y líder, le brinda seguridad a la zaga”.
2. Armani construyó su prestigio
Franco Armani es el testimonio de la persona que escaló a punta de sacrificio y voluntad para edificar su nombre.
Así opina Milton Patiño, otro que defendió el pórtico verde. Para él bastan tres adjetivos para describir la personalidad de Franco: determinante, maduro y con carácter.
“Tiene un estilo muy serio, no se complica, sabe que se juega el prestigio que tanto trabajó por construir”.
Incluso, realizó una racha de 745 minutos sin recibir gol en el torneo, quedando cerca del récord de 806 de Rogerio Ceni de Sao Pablo.
Delanteros con futuro
Angulo y Borja son casos diferentes, pero con el mismo final: el gol.
3. Ángulo, un peligro para Nacional
El delantero de 21 años brilló en esta Copa gracias a sus cinco goles y una velocidad que ha sido admirada en el continente.
“Es un jugador veloz, desequilibrante, mucha habilidad y se vuelve muy peligroso para cualquier defensa”, comenta León Darío Muñoz, exdelantero de Nacional.
Sin embargo, cree que a veces esa velocidad puede llevarlo a tomar decisiones que no son las correctas. “Es muy joven y va a ir corrigiendo eso, pero en las finales las decisiones deben ser siempre acertadas”, puntualiza.
4. Borja, el definidor que se luce en 2016
Descolló con Cortuluá y llegó a Nacional para ser el héroe de la semifinal ante Sao Pablo.
Jorge Agudelo, quien pasó por el verdolaga y fue campeón con Once Caldas en 2004, ha encontrado en el cordobés un finalizador interesante. “Tiene muy buenos movimientos, es rápido y goleador, además de que está rodeado por buenos jugadores como Alejandro Guerra, Macnelly Torres, Marlos Moreno y Orlando Berrío”, dice Agudelo.
Apunta que se debe esperar a ver cómo responde el miércoles ya que en Quito lució perdido. “Uno espera que en el Atanasio sea distinto”.
Por lo pronto, Borja hace parte del cuarteto que tendrán un rol preponderante en la final de la edición 56