Miguel Ángel Hoyos se convirtió en la gran figura de los Panamericanos de ciclismo que se realizaron en Jalisco, México, al ganar cuatro medallas de oro y 5 de plata. Las doradas fueron en persecución por equipos e individual, prueba por puntos y prueba de fondo.
“Lo de Miguel Ángel no es nuevo, venía de ganar los campeonatos nacionales y en México confirmó que es un gran talento, que hay que saber llevar y no llenarlo de grandes expectativas”, dice Gabriel Jaime Vélez, técnico antioqueño y quien tiene la fortuna de dirigirlo.
Para Vélez, lo más importante es que ahora no empiecen a llenarle la cabeza sobre grandes contratos o de propuestas para varios equipos.
“Es un ciclista de apenas 17 años, que lo más seguro es que ya le estén apareciendo los que quieren llevarlo a diferentes equipos. Lo importante es dejarlo madurar, que vaya poco a poco. Condiciones tiene y muchas”.
En el Carmen de Viboral, donde se cumplió recientemente el Nacional juvenil, Hoyos ganó el oro en la contrarreloj y la persecución individuales y en la prueba por puntos. En México lo que hizo fue ratificar su gran momento.
Vélez, quien lo maneja en el equipo Avinal-GW-Carmen de Viboral, lo define así: “Es un talento, corredor de grandes condiciones, tiene un gran futuro, porque lo hace muy bien en la contrarreloj, en ruta es todo terreno y en la pista tambien va muy bien, un ciclista muy completo y joven”.
Agrega que tiene mucha ambición, ganas de salir adelante, muy disciplinado y juicioso en los entrenamientos, “pero es fundamental que vaya despacio y esperar que crezca más en su formación, porque es muy joven”.
Hoyos, quien nació en Granada, Antioquia, donde creció bajo las órdenes de Alfonso Aristizábal, se preparará para el Mundial de ruta, a cumplirse en Yorkshirey (Reino Unido) en septiembre y Vuelta del Porvenir en noviembre.