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Colombia se ilusiona en grande con podio, no con uno, sino con dos representantes, en la edición 76 de la Vuelta a España.
Este jueves, tras la sexta etapa, de 158,3 kilómetros entre Requena y exigente ascenso final al Alto de la Montaña de Cullera -1,9 km de subida-, Miguel Ángel López (Astana) y Egan Bernal (Ineos) dieron señales de fortaleza para luchar por los puestos de honor de la competencia.
López, quien probó sensaciones al atacar a un kilómetro para el final, escaló a la tercera posición de la general, que ahora vuelve a ser dominada por el esloveno Primoz Roglic (Jumbo), bicampeón de la carrera que cruzó en la segunda posición, detrás del danés Magnus Cort (EF Education-Nippo), quien hizo efectiva una fuga de 150 km para lograr el triunfo.
A falta de 150 metros de la meta, Roglic, quien en subidas cortas y explosivas ha demostrado superioridad frente a sus demás rivales, hizo de nuevo diferencia, y sin gregarios, para ganar seis segundos de bonificación al escoltar al vencedor de la fracción.
El esloveno aventaja en la general por 25 segundos al español Enric Mas (Movistar) y por 36 a su compañero, el boyacense López. Otro hombre del elenco telefónico, el veterano Alejandro Valverde, se ubica cuarto, a 41’, mismo tiempo que cede Bernal, quien se ubica quinto.
Entre tanto, el francés Kenny Elissonde (Trek-Segafredo) le fue imposible defender la camisa roja de líder al no lograr seguir el fuerte ritmo de sus oponentes a más de un kilómetro de la meta.
Guardan mesura
Si bien los representantes nacionales están en buenas posiciones, ambos son conscientes de que una carrera tan larga, en la que aún restan más de 30 puertos por superar, todo puede cambiar, como lo aseguró Bernal.
“Buen estrés desde la salida de la etapa, con carreteras estrechas en las que se produjeron caídas. El viento también hizo daño. En realidad fue una jornada de desgaste mental”, dijo Egan.
“López viene con un buen ritmo luego de estar en el Tour y su equipo quiere hacer bien esta carrera porque está en casa. Veo fuerte a Miguel Ángel, falta mucha carrera, por lo que esto puede dar todavía dar mil vueltas, así que se debe estar concentrado”, agregó Bernal, campeón este año del Giro y quien en la presente carrera ha estado combativo y arropado por sus compañeros, entre ellos los ecuatorianos Jhonatan Narváez y Richard Carapaz.
López, por su parte, está tranquilo. “Todo el día se fue muy rápido, hubo bastante tensión. Pienso que hicimos las cosas bien y en meta no cedimos demasiado tiempo”.
Frente a la superioridad de Roglic, Supermán se mostró sensato. “No sorprende que Roglic haya entrado por delante. Sabemos de su clase y calidad y en estos finales sabemos que es normal que llegue bien. Por ahora pasamos bien la primera semana; poco a poco se va haciendo dura la Vuelta”.
La séptima etapa de este viernes será un continuo sube y baja entre Gandía y Balcón de Alicante. Los corredores deberán tener pericia en el recorrido de 152 km, en los que se deberán superar seis premios de montaña, el último de ellos de primera categoría ubicado en el sitio de meta. La ascensión final será de 8,4 km, a 6,4% de desnivel