Una marea humana sigue desbordada en Buenos Aires, con cientos de miles de personas exultantes, envueltas en la bandera albiceleste, a la espera del arribo de sus nuevos ídolos del fútbol.
El astro Lionel Messi y sus compañeros de la Selección serán recibidos como héroes este martes en la capital argentina para celebrar la Copa del Mundo obtenida en Catar-2022, la tercera en la historia de este país.
“Una vez que ya vienen consagrados los tenemos que recibir y decirles ‘gracias, muchachos’”, dijo José Luis Quiroga, de 56 años, en la zona del Obelisco, lugar en el que se celebró la victoria y que fue escogido por los deportistas para festejar a su regreso a Argentina.
“El plantel campeón del mundo partirá el martes al mediodía hacia el obelisco para festejar el título mundial con los hinchas. ¡Sí, somos campeones del mundo!”, escribió la Selección en su cuenta oficial de Twitter.
El triunfo de Argentina ante Francia, en un partido de leyenda que tuvo que llegar a los penales (3-3, 4-2), fue celebrado a lo largo de toda Argentina la noche del domingo por millones de hinchas gozosos, sin que se presentasen incidentes.
Solo en la avenida 9 de Julio, donde se levanta el Obelisco, se concentraron más de un millón de personas, según un estimado del gobierno de la ciudad de Buenos Aires.
“No hubo ningún incidente para destacar. Es muy favorable el resultado de cómo se comportó la gente. Hubo algunos llamados por asistencias médicas y gente extraviada. Hubo 17 detenciones por algunos intentos de robo y algunas peleas aisladas”, refirió a la AFP una fuente de la alcaldía.
“Es un buen equipo, que nos representó muy bien. El mayor momento de celebración será cuando lleguen. Ahora nosotras estamos esperando, seguramente ellos también”, señalaron de su parte las amigas Rosa Rodríguez (63), empleada de limpieza, y Adriana Núñez (57), costurera.
Con el triunfo en esta final, Messi coronó su brillante carrera con el único trofeo que hasta ahora le había resultado esquivo. Ahora, al lado de sus compañeros y familiares, Messi, el ídolo que muchas veces fue criticado por no alzar la Copa Mundo en los anteriores cuatro certámenes que disputo (subcampeón en Brasil-2014), será alabado por sus compatriotas como su segundo “dios” del fútbol, como lo hacen con Diego Armando Maradona, fallecido el 25 de noviembre de 2020 y campeón mundial en 1986 .