El futbolista antioqueño tiene un problema físico desde el 27 de agosto, cuando salió tocado del duelo entre su equipo y Benfica de Portugal.
Cuando puso el pie derecho en el suelo, después de estar un par de segundos suspendido en el aire buscando cabecear un balón dentro del área, Jhon Jáder Durán sintió un dolor fuerte en la parte de atrás de su rodilla. El pinchazo fue fuerte. Él, un futbolista que no suele quejarse, se tomó la parte posterior de su pierna y, después, se quedó tirado en el suelo, revolcándose por el dolor.
Era 27 de agosto. Fenerbahce de Turquía perdía 1-0 con Benfica el partido de vuelta de la tercera ronda de clasificación a la fase de grupos de la Champions League. El técnico portugués José Mourinho envió al delantero colombiano a la cancha cuando corrían 65 minutos de partido. Se esperaba que el criollo pudiera sumar gol, ser el salvador del equipo turco para ingresar al torneo de clubes más importante del mundo.
Pero no lo hizo. Tras el salto a buscar una pelota en el aire, que fue en los últimos minutos del partido, Durán se lesionó. El dolor que sintió fue tan fuerte que por eso se quedó tirado en el suelo. Después salió caminando de la cancha. Se pensó que tenía un desgarro, que en dos semanas, con reposo y terapia, estaría bien, de regreso a las canchas.
Durán no estuvo entre los convocados por Néstor Lorenzo para la última doble fecha de Eliminatoria con la Selección Colombia. Algunos dijeron que por la lesión que sufrió. Unos más que fue consecuencia del presunto desencuentro con el cuerpo técnico y algunos compañeros –referentes–, que tuvo después del partido contra Perú en Barranquilla del 6 de junio.
La ventana Fifa que se disputó en las dos primeras semanas de septiembre, eran el tiempo óptimo para que Durán se recuperara de la lesión que sufrió, de la que Fenerbahce nunca emitió un comunicado oficial. Sin embargo, con el partido ante Trabznospor a la vuelta del próximo domingo, a la vuelta de la esquina, desde Turquía llegó información de que Jhon Jáder no podrá jugar.
El periodista turco Sercan Hamzaoğlu aseguró que en el tiempo que ha pasado desde que se lesionó, hasta esta semana, al futbolista le han hecho varios exámenes médicos para ver la gravedad de su lesión. Dicen que le realizaron un par de resonancias magnéticas. Ambas habrían arrojado buenos resultados.
Sin embargo, el futbolista colombiano ha manifestado que siente dolor. Por eso no lo han puesto a jugar. Tampoco ha logrado entrenar a la par de sus compañeros. Incluso, la prensa manifiesta que el colombiano, al ver que las dolencias no bajaban, había considerado someterse a una cirugía. En el equipo le recomendaron que no lo hiciera.
Por eso, habrían enviado al futbolista colombiano para Barcelona, en España, a que lo revisara uno de los mejores médicos deportólogos de ese país, para que le diera una segunda opinión sobre su lesión e iniciara un nuevo proceso de recuperación que, se estima, lo llevaría a volver a jugar a finales de septiembre.
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