Confunde y reinarás. Ese viejo refrán popular representa el juego en la campaña a la Alcaldía de Medellín. No es un secreto que Federico Gutiérrez es uno de los mandatarios con mayor popularidad del país, y por ello, algunos candidatos a esta administración desean a toda costa arroparse bajo su popularidad.
De esta forma, el expresidente Álvaro Uribe Vélez y el candidato a la Alcaldía por el Centro Democrático, Alfredo Ramos, decidieron cambiar el discurso y acercarse al mandatario a tal punto de que Ramos manifestó: “Queremos el apoyo de Federico, soy amigo personal y admiramos muchas de sus gestiones”.
Esto, para el consultor político José Fernando Valencia, es la jugada del uribismo de crear en el imaginario que Fico es Ramos y pone a Santiago Gómez en una situación incómoda. Además, añadió, la situación plantea un panorama complejo porque Gutiérrez no puede participar en política y por ello no puede dar su opinión o aclara quién es el aspirante de sus entrañas.
El espaldarazo
Estos hechos, despertaron molestias en el equipo del movimiento “Seguimos Contando con Vos” que respalda la candidatura de Santiago Gómez, quien fue el secretario de Gobierno y se promociona con el slogan “El de Fico”. Consideran que las salidas del Uribismo intentan dividir e invisibilizar la bandera de Gómez.
“Quiero hacer un llamado a que no polaricen la ciudad. Esto no es entre izquierda y derecha. No conviertan eso en el ring del uribismo y el petrismo”, puntualizó el aspirante.
Gómez se considera el candidato de “Fico” porque lleva 20 años trabajando a su lado y es “su persona de confianza”. Además, no solo cuenta con el respaldo del alcalde, sino de sus secretarios que han renunciado uno tras otro para pasar del poder municipal a ocupar puestos a la campaña.
Tres dirigentes de peso salientes de la administración se han sumado a la campaña del candidato: ayer Luis Guillermo Patiño, de Educación; María Fernanda Galeano, de Desarrollo Económico y actual gerente de campaña, y Alejandro de Bedout, de Juventud, quien manifestó que se iba a continuar sus estudios.
Además, Gómez realizó declaraciones que hacen más contundente el mensaje: “Federico quiere que este equipo siga. Renunciaron, y van a renunciar otros para fortalecer la campaña. Van a decir que quieren dar continuidad a lo hecho por Federico, y estas renuncias demuestran quién es el aspirante que el actual alcalde quiere que continúe”.
Se alejan
Lo que parecía una alianza cantada entre el uribismo y el fiquismo ya no es tan cercana. Gómez le marcó distancia a Ramos. El candidato manifestó que sus propuestas son diferentes a las de su competidor porque “él dice mentiras para sacar votos y yo digo las cosas como son”.
Por su parte, Ramos dijo que desde lo programático del uribismo ha defendido políticas que implementadas en la Alcaldía. Además, afirmó que no pretenden ningún tipo de división y manejan una campaña respetuosa.
A pesar de las lejanías, la política es dinámica, los candidatos tienen hasta el 20 de septiembre para hacer coalición, las encuestas los obligarán y los que como el agua y el aceite parecen incompatibles podrían terminan en el mismo bando.