Un llamado a la tolerancia hizo el coronel Luis Fernando Peralta, comandante de la Estación Poblado de la Policía, tras el asesinato de Jaime Alberto Chavarriaga Agudelo, suegro del ex futbolista Víctor Hugo Aristizábal.
Los hechos se presentaron en la calle 10ª con carrera 43 B, en el barrio El Poblado, a eso de las 2:30 p.m. de este lunes.
Luego de recibir dos puñaladas, Chavarriaga, de 55 años y propietario de un local comercial de telefonía y computadores, caminó dos cuadras hasta la estación de Policía, donde fue auxiliado.
De ahí fue trasladado a la Clínica Medellín de El Poblado, donde habló con su hija Catalina María Chavarriaga Lopera, esposa de la estrella del Atlético Nacional y además entregó su declaración a las autoridades de lo que había sucedido.
Chavarriaga alcanzó a decir que no era la primera vez que tenía un altercado con quien lo ultimó.
Algunos testigos dijeron que el pasado 27 de mayo, ambos se habían enfrentado a las afueras del Centro Comercial Dumar, que se ubica sobre la avenida El Poblado.
“El agresor al parecer estaba con unos amigos y en medio de los juegos entre ellos, pisaron al señor Chavarriaga, él les llamó la atención y desde ese día comenzaron los inconvenientes”, dijo Peralta.
El deceso del suegro de Aristizábal se produjo a eso de las 6:30 de la tarde de este lunes, luego de ser intervenido quirúrgicamente, por una de la heridas en el cuello.
