Un accidente de tránsito cerca a Chinchiná, Caldas, fue la prueba de fuego para el vehículo de bomberos que diseñaron y ensamblaron Diego Echavarría y Mario Jaramillo.
"Cuando nos vieron llegar nos dijeron que no servía porque era un carro de bomberos y ellos necesitaban una grúa para evitar que el carro se fuera al abismo. Entonces, sacamos la grúa y rescatamos el carro", recuerda Echavarría.
Mario es empresario y fundador del cuerpo de bomberos voluntarios de Envigado. Diego, es odontólogo y diseñador industrial. Se conocieron en ese organismo y hacen parte del cuerpo de bomberos voluntarios de Chinchiná, al que Jaramillo donó el vehículo.
Comparten su pasión por ayudar a la gente a través de los bomberos y por eso decidieron aplicar los conocimientos de más de 20 años de experiencia para construir un vehículo económico, en el que se pueden movilizar seis personas y acorde a la topografía del país.
Si se habla de costos, aseguran que vale 290 millones mientras un vehículo importado puede costar el doble, con el lío de que no tiene garantía en el país.
También se hizo pensando en que los bomberos colombianos no son tan corpulentos como los de Estados Unidos y por lo tanto se evitan esfuerzos que les puedan causar lesiones de espalda, que son las más comunes en el gremio.
Además, se pensó en el trazado y la arquitectura de los municipios. Y es que ambos recuerdan los daños que causó un carro donado a los bomberos de Marinilla que era tan alto que se llevó un balcón.
Aunque para un ciudadano desprevenido se trata de un carro de bomberos, Diego y Mario señalan que se trata de un vehículo multipropósito que cumple cuatro funciones: atiende incendios forestales, vehiculares, estructurales y de materiales peligrosos; rescates en altura; atención prehospitalaria; y entradas forzadas porque cuenta con una grúa de rescate.
Los "gallos"
Una de las cosas que los enorgullece es la velocidad de respuesta: en 9 segundos pueden comenzar a echar agua mientras en otros vehículos se pueden demorar hasta 5 minutos. Es más, pueden disparar hasta 5 chorros de agua al tiempo. Cuenta con tres bombas independientes que se pueden bajar y atender tres emergencias al tiempo. Esto es de utilidad para municipios que no cuentan con recursos para comprar implementos. Esa economía fue la que motivó en buena parte el proyecto porque saben que si bien la ley obliga a cada municipio a contar con un cuerpo de bomberos hay alcaldías de poblaciones pequeñas que no disponen de un gran presupuesto.
Dado que el carro permite desplegar una lona debajo de la cual se puede instalar un puesto de mando y poner a cargar equipos (celulares, computadores) porque cuenta con una planta eléctrica, también se puede aprovechar para campañas de vacunación.
La lista de utilidades que enumeran Mario y Diego es larga, porque ensamblaron el carro pensando en que fuera una caja de sorpresas que no deje tirado a ningún bombero y que en caso de emergencia preste la mejor atención.
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